Se celebra la primera Jornada de Profesionales Cristianos de la Salud
El Secretariado de la Pastoral de la Salud convoca a una cincuentena de profesionales sanitarios en Sant Pau del Camp para compartir inquietudes y experiencias
Fotografías: Ramon Ripoll
Tras varios intentos suspendidos a causa de la pandemia, finalmente, esta primera quincena de noviembre, el Secretariado de la Pastoral de la Salud ha celebrado la primera Jornada de Profesionales Cristianos de la Salud. El objetivo del encuentro era intercambiar puntos de vista y vínculos fraternos entre el personal del ámbito sanitario cristiano. El obispo auxiliar de Barcelona, Mons. Antoni Vadell se unió a la jornada, así como varios miembros del sector médico i de la Pastoral. Entre estos destacaba la directora del Secretariado, Carmen Benito, i el conciliario, Mn. Eduard Puig. Médicos, enfermeras, así como sacerdotes y religiosos que trabajan en la pastoral participaron en la jornada.
Durante la Jornada hubo intervenciones testimoniales para reflexionar, en las que se profundizó en diversos aspectos de la Pastoral desde el punto de vista de los profesionales y de los sacerdotes. También, se celebró la eucaristía que presidió el obispo Vadell concelebrada con los presbíteros que trabajan en la pastoral del enfermo. De la pastoral en hospitales asistieron: Mn. Josep Maria Pastor, responsable de la pastoral de la salud en el Hospital Sagrat Cor; Fray Felipe de Medelín, responsable pastoral salud Clínico; y Mn. Adilson Tolentino, encargado en los Hospitales de Bellvitge y del Sagrat Cor
Una jornada esperada
«¡Ha sido un verdadero éxito que ha superado las expectativas!», así lo expresaba emocionada la directora del Secretariado de la Pastoral de la Salud de Barcelona, Carmen Benito. Según explica la responsable, fue con el estallido de la pandemia que surgió la idea de encontrarse entre los distintos grupos de profesionales cristianos del sector médico.
Los líderes fueron los jóvenes profesionales del grupo Moscati, creado en plena pandemia para compartir experiencias vividas y apoyarse. A partir de dos encuentros que realizaron, con la participación del obispo Toni y Carmen Benito, se comentó la posibilidad de una jornada donde se encontraran todos los grupos de profesionales cristianos del ámbito sanitario. Y así ha sido como Sant Pau del Camp, la sede de la pastoral de la Salud del Arzobispado, acogió a una cincuentena de personas para poner en común lo que compran la Pastoral del Enfermo hoy en día.
Una experiencia compartida con la fe
Tal y como expone Benito, durante la jornada se «compartió cómo se ha vivido esta situación excepcional, cómo estamos y qué retos afrontamos en la atención que realizamos desde primera línea a las personas que sufren, una enfermedad u otras circunstancias vitales». En este sentido, Viqui Marquina, una joven médica del grupo Moscati, explicó, en primera persona, cómo vivió ese momento de crisis y cómo vive la fe día a día, con sus compañeros y pacientes, en medio del entorno sanitario.
También, el dr. Adalbert Marquès habló de los «Desafíos por los profesionales sanitarios católicos en el siglo XXI» y, por otra parte, el consiliario de la Pastoral de la Salud, Mn. Eduard Puig sobre las «Vivencias desde los Servicios Religiosos de los Hospitales». En su intervención, Puig insistió en la necesidad de «ser ejemplos de alegría en medio del contexto de los hospitales», donde el paciente necesita a alguien que le escuche y le saque una sonrisa.
La pastoral de la Salud, desde el «Buen Samaritano»
El obispo Toni intervino desarrollando «La figura de Jesús frente a los pacientes», desde la parábola del buen Samaritano. Por un lado, se puso en la piel de quien sufre la enfermedad, agradeciendo la ayuda y la acogida a los agentes de la pastoral del enfermo y del ámbito sanitario que le acompañan. Insistió en cómo éstos eran el ejemplo de lo que enseña la parábola del buen samaritano, «esencial en el ámbito sanitario». Tal y como dijo, un sanitario cristiano debe buscar y acoger, como el buen samaritano, aquél que lo necesita y pide de su ayuda más que nunca. «No puede girar la vista, sino que debe ocupar su sitio, detectar a aquel que sufre y darle amor», dijo.
También, durante la misa, invitó a los profesionales del ámbito sanitario y agentes de la pastoral de la Salud a encomendarse a Dios, ante los momentos más difíciles. «Es necesario que nos dirigimos con fe al Señor para orar por los hermanos enfermos con insistencia, siendo conscientes de que lo que va a pasar sólo lo sabe el Señor».
Perspectivas de futuro
Después de esta primera Jornada, se espera un siguiente encuentro. De hecho la propia directora del Secretariado, Carmen Benito asegura que lo ideal sería encontrarse un par de veces al año para mantener y fortalecer ese vínculo. «Con este encuentro hemos descubierto un grupo muy potente, y queremos seguir trabajando para que los sanitarios cristianos sepan cómo pueden encontrarnos y cómo funciona el engranaje de la Pastoral de la Salud, que trabaja desde el Arzobispado».
Frutos y buenas sensaciones
También, entre los asistentes coinciden cómo la reunión ha sido un acierto y una propuesta muy completa, puesto que, además de la formación y el momento más espiritual, también se compartió experiencias y se encontraron cara a cara entre profesionales del mismo sector . «Ha sido un apoyo anímico y motivador», explica Viqui Marquina. Asegura que la Jornada ha permitido «establecer redes de trabajo entre gente diversa relacionada con sanidad y conocer a algunos que no sabíamos que estaban haciendo de curas en los hospitales».
En la misma línea, el encargado de la Pastoral de la Salud en Bellvitge y en el Sagrat Cor, Mn. Adilson Tolentino, hace una «valoración muy positiva, «porque encontrarse después tanto tiempo ha sido enriquecedor y cariñoso, sobre todo por el intercambio de experiencias que supone y la confraternización». Una iniciativa que, como añade Benito, propone «caminar coordinados en una misma línea, en el ámbito sanitario», como propone el Santo Padre: en sinodalidad.