Corpus en diversidad
"Caminamos Juntos con la diversidad" celebra el fin de curso con una jornada de convivencia en Solsona y el Santuario del Miracle

El día de la festividad del Corpus, el colectivo «Caminamos Juntos con la diversidad» .- Colectivo, que forma parte de Cáritas Diocesana y de la Delegación de Pastoral Social del Arzobispado de Barcelona integrado por comunidades de migrantes y parroquias con presencia significativa de personas nacidas fuera del país-, organizó, como cada año, la convivencia de fin de curso. Fue la octava edición. En estas convivencias se visitan diferentes lugares de Cataluña, este año fue en Solsona y el Santuario del Miracle.Una ocasión para la convivencia de las familias, para orar juntos y también para conocer diferentes lugares del País en que viven, así como su cultura.
Participaron 437 personas de diferentes comunidades, entre otras la comunidad china, filipina, comunidad de Bisila, latino americana y miembros de las parroquias del Poble Sec, La Luz del Hospitalet, la del Carmen de Barcelona, de Sant Jaume de Santa Coloma de Gramanet, de Santa Ana de Barcelona y algunas familias refugiadas, procedentes de Siria y otros.
La salida de los 8 autocares, fue a las 8 de la mañana. Recién llegados a Solsona los recibieron un grupo de trabucaires. Durante la mañana se visitó la ciudad, que, con motivo de la fiesta del Corpus, se encontraba de fiesta. Los participantes en la salida pudieron disfrutar del baile de los gigantes y caballeros y de los diferentes desfiles que había organizadas. Especialmente emotivo para muchos fue la procesión de Corpus en la plaza de la Catedral.
A la una de la tarde se celebró la Eucaristía en la catedral de Solsona. Antes de comenzar la liturgia, el canónigo Mn. Lluís Grifell, haga una amena explicación del significado de la Catedral y de su historia y de la importancia que tiene para Solsona la Virgen del Claustro. La Misa fue presidida por Mn. Josep m Jubany, delegado de Pastoral Social, y concelebrada por sacerdotes de los diferentes colectivos. Como ya es habitual en estos actos, el cantos y las lecturas fueron en diferentes idiomas.
Comieron en el ayuntamiento de Solsona. Ni que decir que fue un momento intenso de convivencia. La comida cada uno se lo llevaba, pero se intercambiaron las comidas, y pudimos degustar platos típicos de los diferentes países.
A las cuatro de la tarde, fueron al Santuario del Miracle, en donde los recibió en nombre de la comunidad benedictina el monje Jordi Castaño, quien explicó la historia del Santuario, y hizo una descripción del hermoso retablo barroco. Hubo un momento, muy emotivo, cuando una chica refugiada de Siria, cantó con armenio una canción dedicada a la Virgen.
Una Jornada que los participantes valoramos mucho. Es una ocasión para la convivencia de las familias, para orar juntos y también para conocer diferentes lugares del País en que viven, así como su cultura.