Barcelona otorga la licencia de obras a la Sagrada Familia
El Ayuntamiento entrega a la Junta Constructora del templo el permiso por las obras del edificio, un acuerdo histórico que ha tardado más de 130 años a hacerse realidad
El proceso histórico de la licencia de obras de la Sagrada Familia llega a su fin. El Ayuntamiento ha hecho entrega formal de la licencia de obras del templo a la Junta Constructora. Así, la misma junta ya ha ingresado los 4,6 millones de euros correspondientes a los impuestos y las tasas del permiso. Por lo tanto, este miércoles 24 de julio se ha regularizado de manera definitiva un asunto pendiente desde hace más de 130 años.
Un paso tras otro
La licencia de obras del templo establece las condiciones para la construcción de la basílica ubicada a la calle Marina. Un fruto del acuerdo firmado previamente en el cual la junta se comprometía a pagar 36 millones de euros en 10 años para mejorar aspectos vinculados a la urbanización, la movilidad, el transporte público y el mantenimiento del espacio público del entorno. El pacto se formalizó y ahora llega el siguiente paso, el permiso de obras. En concreto, la licencia prevé una gran rehabilitación con una edificación que consta del edificio principal, varias torres y dos plantas de sótano. Con esto el presidente delegado de la Junta Constructora ha afirmado que: “La Sagrada Familia siempre pagará lo que por ley toque, y así lo hemos hecho”. Un proyecto aún faltan muchos acuerdos para llegar pero la postura de la Junta es clara “diálogo, diálogo y diálogo”.
Qué incluye la licencia de obras
El techo máximo edificable es de cerca de cincuenta y tres mil quinientos metros cuadrados y la superficie construida sobre rasante llega a los cuarenta y un mil metros cuadrados. En cuanto a las dos plantas subterráneas, la -2 contiene almacenes y la -1 cuenta con la cripta, galerías bajo la nave principal e instalaciones. La licencia también describe una construcción del templo por etapas, y prevé un plazo de ejecución total que finalizará en 2026.
Sagrada Familia, religión y cultura
En paralelo a la licencia de obras, el Ayuntamiento y el templo también ha tramitado los permisos de actividad en cuanto a los usos de la basílica. Así, la actividad principal del edificio es de centro de culto visitable, abierto al público más allá del horario de los actos litúrgicos. E incluye una parte de museo, por lo cual el uso es religioso y cultural. Se incluyen, además, usos compatibles relacionados con el funcionamiento y la administración del centro, como la sacristía, oficinas o talleres de mantenimiento. A la vez, se hace constar el uso comercial como complementario, ubicado a las plantas del sótano.