Carta dominical | «Recuperemos la alegría de ser cristianos»

El próximo 22 de abril a las cinco de la tarde, en la Basílica de Santa María del Mar, se iniciará una nueva etapa en la archidiócesis de Barcelona. De aquí a una semana presentaremos el nuevo Plan pastoral: Orientaciones y propuestas para una conversión pastoral en la archidiócesis de Barcelona. ¡Todos estáis invitados a participar en este acto!

Este documento se ha preparado con la colaboración de muchas personas, fruto de la reunión que celebramos en la Basílica de Santa María del Mar cuando se clausuraba el Año de la Misericordia. Fue el punto de partida del camino que nos ha llevado hasta aquí.

Durante unos meses hemos reflexionado, hemos rezado y hemos dialogado para saber qué dice el Espíritu a la Iglesia de Barcelona. Ahora, teniendo en cuenta las numerosas aportaciones recibidas, hemos desarrollado unas ideas fundamentales con propuestas pastorales prioritarias que deben orientar y promover la acción de la Iglesia en la archidiócesis de Barcelona en los próximos años.

No estamos ante un plan pastoral estándar. Más que una lista de acciones concretas, este nuevo documento quiere ser una hoja de ruta que nos ayude a hacer un camino de conversión pastoral, que nos prepare interiormente y comunitariamente a dar el paso de una Iglesia de mantenimiento a una Iglesia en salida. Ahora bien, cuando hablamos de salir no nos referimos únicamente a dar testimonio fuera del templo de la parroquia, sino que hacemos una invitación a salir de nosotros mismos, de nuestros egoísmos y personalismos.

El nuevo Plan pastoral es un sendero que nos conduce a recuperar la alegría profunda de que es portadora la fe cristiana y, particularmente, la alegría que resulta de vivir y anunciar el Evangelio. Esta conversión pasa necesariamente por el encuentro personal y comunitario con Jesucristo. Un encuentro que permita nuestra transformación evangelizadora y misionera. Es precisamente Jesucristo quien, como nos recuerda el papa Francisco, «puede romper los esquemas aburridos en los cuales pretendemos encerrarlo y nos sorprende con su constante creatividad divina. Cada vez que intentamos volver a la fuente y recuperar la frescura original del Evangelio, brotan nuevos caminos, métodos creativos, otras formas de expresión, signos más elocuentes, palabras cargadas de renovado significado para el mundo actual». (EG 11)

El gran objetivo que nos proponemos es recuperar la alegría de cumplir la misión que nos ha confiado Jesucristo. Una alegría que, como dice el Papa, no se vive de la misma manera en todas las etapas y circunstancias de la vida. Hacemos nuestra desde ahora la invitación del Papa: «Poco a poco hay que permitir que la alegría de la fe comience a despertarse, como una secreta pero firme confianza, aun en medio de las peores angustias». (EG 6)

Os invito a vivir con pasión y entusiasmo el actual cambio de época en una sociedad más diversa y compleja. En el fondo, se nos pide ser santos para responder a los retos de esta nueva realidad. Es decir, se nos pide vivir unidos a Jesucristo dejándonos guiar, como Él, por el Espíritu Santo. Como decía el filósofo Henri Bergson (1859-1941), «los santos no tienen necesidad de hablar, porque su vida ya es un testimonio».

Que la Virgen bajo la advocación de la Merced, patrona de nuestra archidiócesis, en el año del octavo centenario de la fundación en Barcelona de la orden religiosa que lleva su nombre, nos ayude a hacer realidad aquellas palabras que Ella dijo en las bodas de Caná: «Haced lo que Jesús os diga». (Jn 2,5)

† Cardenal Juan José Omella
Arzobispo de Barcelona

Escucha la carta dominical en la voz del cardenal arzobispo de Barcelona.