Una Navidad con Sant’Egidio en el corazón de la pandemia para un mundo más humano
La Comunidad celebra un año más el 25 de diciembre con sus amigos en un encuentro con el cardenal Omella en 'Sant Just i Pastor'
Fotografías Comunidad de Sant’Egidio
Este año, se ha vivido una Navidad diferente en la Basílica de Sant Just i Pastor. En el corazón de una pandemia que se resiste a ser vencida. La Comunidad de Sant’Egidio ha celebrado este 25 de diciembre también junto a los pobres y los frágiles, amigos de siempre. El arzobispo de Barcelona, Card. Juan José Omella, se ha sumado a la celebración disfrutando del calor de la familia de Sant’Egidio.
La familia de los de siempre
A pesar de las restricciones y las medidas de seguridad requeridas por la Generalidad de Cataluña, no se ha perdido la esencia. «Sólo ha cambiado la forma, no el clima y la fiesta de familia, la más importante del año». Así lo explicaba el responsable de la Comunidad de San Egidio en Barcelona, Jaume Castro. Según dijo, en la basílica de Sant Just se ha tenido que cambiar el método. «En lugar de la mesa, imposible de disponer para todos juntos en el tiempo del Covid-19 – explicaba Jaume Castro- estaban las sillas para acoger a los invitados, pero las personas eran las mismas que otros años».
Unos setenta «sin techo» han recibido su regalo y ha podido conversar con los voluntarios y miembros de la comunidad. También, con el cardenal Omella, el cual ha dirigido unas palabras de agradecimiento a la Comunidad que llena la iglesia de San Just y con la magia de la Navidad. Una Navidad vivida con los pobres y para ellos.
Ya en la salida, los invitados, han recibido un paquete de comida navideña. La comida estaba recién hecha y constaba de lo que requiere el tradicional comida navideña. Para seguir las normas anti-Covid, se ha ofrecido una bolsa con la comida con las condiciones para conservar el calor y con material reciclable.
550 comidas para celebrar la Navidad
Este año, en total se ha distribuido la comida de Navidad y regalos a 550 «sin techo» en 8 lugares de la ciudad. También se ha llegado a 340 ancianos en las casas, y en más de 500 familias a los que se ha hecho llegar un don y un paquete para preparar la comida en casa. Particularmente emotiva ha sido las visitas y dones que se han hecho en las residencias. Este año, por los efectos de la pandemia que ha empobrecido significativamente a la población han sido reunidas muchas más personas.
«A pesar del aumento de la pobreza, también ha aumentado la solidaridad, asegura Castro». Durante todo el periodo navideño continuarán las distribuciones, como se hace durante todo el año. La Comunidad de Sant’Egidio felicita este #Nadalperatots.
Tradición arraigada
La comida de Navidad con los pobres es una tradición que comenzó en Roma en 1982 en la Basílica de Santa María in Trastevere y es un carácter distintivo de la Comunidad de Sant’Egidio en todo el mundo. Este año en la Basílica de Santa María in Trastevere también se ha abrazado a todo el mundo, acogiendo sin techo, ancianos solos, refugiados que han recibido un don, así como los que le acompañaban, porque en Sant’Egidio se confunde quien sirve y quién es servido.