Un paso más hacia el presbiterado
El obispo Antoni Vadell instituye siete nuevos acólitos en el Seminario Conciliar de Barcelona
Cinco seminaristas de Barcelona y dos de Sant Feliu de Llobregat han recibido el ministerio de acólitos. Fue este 6 de noviembre, a manos del obispo auxiliar de Barcelona Mons. Antoni Vadell. El acto tuvo lugar en el Seminario Diocesano de Barcelona en el transcurso de una solemne celebración eucarística. Sergio Adán, Jordi Avilés, Santiago Cellier, Alfonso de Alarcón, Juan Francisco Cortés, Samuel Gutiérrez y Pablo Manent volvieron a decirle al Señor: «Estoy aquí.»
Después de tiempo de formación, afrontaban el acolitado. No como un mero trámite en su camino hacia el sacerdocio, sino como un paso más, con convicción y alegría. Todo para vivir la aventura apasionante en la que han sido llamados. Se trata de un ministerio de servicio al altar, especialmente, en la celebración de la misa. Una celebración que implica, necesariamente, una participación singular en el servicio de la Iglesia.
Entregar la vida a los hermanos
Los nuevos acólitos fueron invitados por el obispo Vadell a convertirse en instrumentos dóciles de la gracia, capaces de participar con unción en el culto público de la Iglesia: «Como decía el beato Pere Tarrés, vosotros mismos debe ofrendar su vida a Dios al altar y entregarla en favor de los hermanos.»«La desproporción entre nuestra pequeñez y la misión recibida es enorme -le recordarles también el obispo-, y os aseguro que esto irá in crescendo, pero no tenga miedo , porque el Señor os ha escogido y amado con predilección. »
Tras la bendición del obispo sobre los candidatos, tuvo lugar el rito propio del acolitado. Es decir, cuando se hizo la entrega simbólica de la patena con el pan. También, unas breves palabras que recogían la esencia del nuevo ministerio recibido: «Vive de tal manera que puedas servir dignamente la mesa del Señor y de la Iglesia.»