Medio millar de niños en los talleres navideños del Museo Diocesano
La jornada empezó con una exposición de pesebres realizados por la Asociación de Pesebristas de Barcelona para acabar con un pesebre hecho por cada niño
513 familias han participado en el Taller de Navidad del Museo Diocesano durante este puente de diciembre. La actividad consistía en hacer un pequeño pesebre individual y pedir un deseo a la Estrella para este 2020. El claustro de la Catedral y el Museo Diocesano de Barcelona han sido los escenarios principales de la jornada. Antes, pero, los más pequeños, junto con sus familias pudieron disfrutar de una pequeña visita a la exposición de dioramas. Nueve pesebres de la Asociación de Pesebristas de Barcelona. Esto si, el pequeño pesebre hecho por los niños y niñas se lo han podido llevar a sus casas, un obsequio para decorar los hogares estas fiestas.
El imaginario colectivo
Oponiéndose al imaginario contemporáneo que asocia la Navidad con el consumismo, las luces y los regalos, «el objetivo del taller es recuperar el origen intrínseco a la Navidad. Recordar a los niños el pesebre y el nacimiento de Jesús con una vertiente familiar y de diálogo con los padres», ha explicado la conservadora del Museo Diocesano, Blanca Montobbio.
Los pequeños más grandes
Los pesebres en miniatura se han construido con judías, pintados para representar los personajes de la Sagrada Familia. A gusto del consumidor, se podían poner dentro de una nuez, de un pequeño bote, del dibujo del Claustro o incluso dentro de un marco de cartulina que simulaba su coro. La iniciativa cuenta con la colaboración de los secretariados diocesanos de Pastoral Familiar, Catequesis, Librería Laie y Gráficas Molero. «La afluencia y la respuesta de los participantes ha sido todo un éxito», ha concluido Montobbio.
