Las 10 Cáritas con sede en Catalunya afrontan la segunda ola de la COVID-19

La entidad impulsa la campaña «La pobreza también rebrota», con el objetivo de obtener recursos para responder a las consecuencias económicas y sociales de la segunda ola y de un posible confinamiento

La pobreza también rebrota, este es el lema  de la campaña que las diez Cáritas con sede en Catalunya han impulsado para hacer  frente a la situación que puede brotar en las próximas semanas. El presidente de Cáritas  Catalunya, Francesc Roig, ha advertido que ya se está detectando una nueva  llegada de personas en los despachos de la entidad, y que hay que estar  preparados para afrontar la nueva situación. «Muchas de las Cáritas con sede en  Catalunya ya han agotado el presupuesto que tenían previsto para todo el 2020. Ante este contexto, apelamos a la solidaridad de la ciudadanía para continuar garantizando las  ayudas a las personas más vulnerables de nuestra sociedad», ha indicado Roig. 

En mayo aumentaron un 63% las personas atendidas  por los servicios de primera respuesta en Catalunya

Cáritas ha recordado que en mayo aumentaron un 63% las personas atendidas  por los servicios de primera respuesta en Catalunya, pasando de 63.300  personas a más de 103.000, y que este incremento obligó a destinar muchos  más recursos para cubrir necesidades básicas como la alimentación o los  gastos relacionados con la vivienda. «1 de cada 3 personas atendidas por Cáritas  no había necesitado nuestra ayuda. Es una situación que nos recuerda a la crisis de 2008,  con la diferencia que esta ha afectado a todos los sectores económicos sin excepción,  también a la economía sumergida», ha destacado el presidente de Cáritas Catalunya. 

1 de cada 4 hogares atendidos por Cáritas no dispone de ningún  ingreso

Actualmente, 1 de cada 4 hogares atendidos por Cáritas no dispone de ningún  ingreso, situando al 65,2%, de las familias por debajo del umbral crítico de la  pobreza severa. Esto supone que la mitad de las familias tengan dificultades para pagar  el alquiler, la hipoteca o los suministros. «La situación es insostenible. El 36% de  las familias han tenido que reducir los gastos de alimentación, y un segundo  confinamiento puede ser letal para muchas de estas personas. No podemos  esperar ni un minuto más a tomar medidas y mitigar el impacto social de la  COVID-19», ha afirmado Roig.

La campaña estará activa durante los meses de octubre y noviembre, y el dinero  recaudado irá destinado principalmente a las ayudas directas para pagar alquileres,  realquileres, facturas o la compra de alimentos. 

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