La parroquia de Sant Vicenç estrena nuevo órgano
Las celebraciones musicales mejoraran en la iglesia de Sarriá con el instrumento construido por Albert Blancafort, que será inaugurado esta semana por el Cardenal Omella

La iglesia de Sant Vicenç de Sarrià inaugura su nuevo órgano. El acto inaugural será el próximo 16 de noviembre con la bendición del Cardenal Omella. El instrumento sustituirá el viejo para reavivar la vida musical y religiosa en el barrio, mejorando la calidad y cantidad de las celebraciones con conciertos y audiciones.
La Comisión de Construcción del Nuevo Órgano
La iniciativa empezó gracias a la gente del barrio que reclamaba un órgano de calidad porque el vigente en su momento estaba viejo. Un grupo de personas de Sarrià, el rector de la parroquia de Sant Vicenç, organers y organistas se agruparon para formar la Comisión de la Construcción del Nuevo Órgano con la intención de recaudar fondos para fabricarlo y planificar cómo sería su inserción a la Iglesia integrada dentro del proyecto arquitectónico del instrumento de viento. «Entre nosotros, nos ayuda a encontrar la paz en el coro, nos ayuda a abrirnos al misterio, a huir de las desazones», decía el rector de la parroquia Salvador Bacardit resaltando los efectos que en uno puede despertar la música del órgano.
La marca Blancafort
El instrumento está diseñado por Albert Blancafort, un maestro orguener catalán que siguió el camino de sus antepasados. El árbol genealógico denota una tradición de músicos, organistas y orgueners que empezó su bisabuelo, Joan Baptista Blancafort. Fue fundador de la fábrica de pianola Victoria. Blancafort es actualmente una marca de más de 150 órganos en Cataluña.
Órganos desaparecidos
Cataluña contaba con una admirada colección de órganos a nivel mundial, pero durante la Guerra Civil, muchos fueron destruidos o reaprovechados para crear armamento. El de Sant Vicenç fue uno de los desaparecidos. En el 1941, se pudo reemplazar solo por un pequeño órgano de segunda mano que se había fabricado al 1925. La intención era que fuera provisional porque no había prous recursos como para estrenar uno. No obstante, el sustituto se ha mantenido durante 80 años. «Ha durado hasta ahora, que ya está muy bien», opina Albert Blancafort, el arquitecto del nuevo órgano.
Un tubo, un altavoz
El órgano actual tiene unas dimensiones medianas si lo comparamos con otros, como el del Monasterio de Montserrat, el más grande de Cataluña y de los más grandes de Europa. 4000 tubos y 12,5 metros de altura son las dimensiones del teclado montserratí. En cambio, el de Sarriá cuenta con unos 2500 tubos distribuidos en 40 registros, tres teclados y un pedal.
La música del órgano siempre ha sido considerada como la transmissora del mensaje de Dios y lo ha acercado a todas las personas. El mismo Concilio Vaticano II en el artículo 120 alaba su función, tal como cita Albert Blancafort: “se tendrá en cuenta el órgano de tubos por su gran poder de elevar las almas a Dios y a las realidades celestiales”. La vibración que transmite un órgano es inmensa. «Cada tubo del órgano hace función de altavoz» aseguraba. Por lo tanto, cuando se pone en marcha, es cómo si casi 3000 altavoces «transmitieran el sonido del instrumento musical más venerado de la Constitución eclesiástica» concluía.
Las próximas celebraciones
Sábado 16 de noviembre a las 18.00 h el arzobispo de Barcelona, el Cardenal Omella presidirá el eucaristía con la participación de los organistas parroquiales, el Orfeón y la Capilla de Música. Los siguientes domingos a las 18.00 horas harán el relevo una serie de conciertos inaugurales. La entrada es libre y la aportación voluntaria. El Domingo 24 de noviembre, a cargo de Juan de la Rubia. El Domingo 15 de diciembre, a cargo de Montserrat Torrent. El Domingo 19 de enero de 2020, a cargo de Bernat Bailbé, órgano, y Marcos Faus, trompeta. Y el último será el Domingo 2 de febrero, a cargo de Manuel Rodríguez al órgano, y Marc Monzonis a la trompeta.