El Secretariado de la Pastoral de la Salud celebra la Pascua del Enfermo
La parroquia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa acoge la celebración presidida por el obispo auxiliar Mons. Javier Vilanova Pellisa
Este sexto Domingo de Pascua el Secretariado de la Pastoral de la Salud del Arzobispado de Barcelona se ha encontrado para celebrar el día de la Pascua del Enfermo. Este año, la celebración, a diferencia de otros años que se hacía en un hospital de la archidiócesis, tuvo lugar en la parroquia de Nuestra Señora de la Milagrosa. De esta forma, la celebración dominical unió la feligresía de la parroquia con algunos miembros de los equipos de la pastoral de la Salud del arzobispado de Barcelona.
El obispo auxiliar Mons. Javier Vilanova Pellisa presidió la celebración, acompañado del párroco Mn. Xavier Pagès, así como, de los sacerdotes del Hospital Sagrat Cor, Mn. Samuel y del Hospital Clínic Mn. Josep Maria Pastor.
¿Por qué celebramos la Pascua del Enfermo?
Tal y como se explicó, se trata de un día que se instauró en 1985, previamente a la Jornada Mundial del Enfermo que tiene lugar el 11 de febrero, y que se ha mantenido especialmente en territorio español por el significado que comporta la Pascua. Así lo explicó Mn. Josep Maria Pastor, sacerdote del hospital el Clínic que al inicio de la celebración. Éste intervino explicando la importancia del día y de esta Pastoral citando las palabras de la Directora del Secretariado Carmen Benito, que no pudo asistir a la celebración. Según dijo, «en España se mantiene esa fecha debido a connotaciones positivas que conlleva: celebración dominical, inserción en la Pascua de Resurrección, salida del invierno, que invita a la esperanza».
En su intervención Mn. Pastor, añadió que mucho antes de que se conformaran las pastorales de la Salud, la Iglesia siempre ha velado por los enfermos por medio de las iniciativas congregacionales, asociativas y diocesanas. «Fue después, a principios de los años 60 – explicaba Mn. Pastor- cuando comienza un movimiento de personas y colectivos a coordinar una mejor organización y cooperación y concienciación en el mundo de la Salud para cuidar a los enfermos».
Abrirse a Jesús para amar
El obispo Javier Vilanova en el momento de la homilía, subrayó ese día de la Pascua del Enfermo para recordar que debemos cuidarnos unos a otros. Un mensaje en la línea de lo que se pide a los cristianos. «Jesús es amor y él nos dice nos ama y que debemos amar a los demás. Hay que abrir el corazón a Dios para que actúe en nosotros».
Estableciendo un diálogo cercano con la feligresía, especialmente con los jóvenes sentados en las primeras hileras, insistió en seguir los mandamientos para que «amamos unos a otros» especialmente a los ancianos. «El espíritu Santo está con nosotros y su fuerza actúa. Dejemos que actúe en nosotros», dijo.
«Allí, en el hospital, también encontramos a Jesús en el hermano enfermo». En este sentido, el obispo agradeció a los agentes de la pastoral del enfermo su trabajo e hizo un llamamiento a buscar más miembros para visitar y cuidar a quienes padecen una enfermedad.