¡Digamos basta al ‘sinhogarismo’!
Un centenar de personas se concentran en la Plaça Sant Jaume de Barcelona para reclamar que ninguna persona sin hogar es posible

Educación, ropa, electricidad, comida o vivienda? Con que gastarías tu dinero? Así se ha planteado el acto de la Red de Atención a Personas Sin Hogar, un clamor bajo el lema «DI BASTA! NADIE SIN HOGAR». Para que la situación no se detiene sino que se incrementa. Un centenar de personas se han concentrado este mediodía en la Plaça Sant Jaume para decir que ninguna persona durmiendo en la calle es posible.
La acción de calle ha querido denunciar la imposibilidad de vivir con una cantidad simbólica de 430€ mensuales. Utilizando un mural, las personas participantes en el acto han tenido que pensar donde destinaban estos 430€, dándoles a escoger entre vivienda, transporte, ropa, suministros, y comida. Ante esta elección, y sabiendo que solo podían colocar el dinero en una de estas necesidades básicas, la mayoría de personas han elegido la vivienda como el elemento más imprescindible para garantizar una vida digna.
El acto, convocado por la Xarxa d’Atenció a Persones Sense Llar (XAPSLL), ha querido alertar sobre la situación que viven las personas sin hogar en la ciudad de Barcelona, recordando que cada noche más de un millar de personas duermen en calles y plazas de la ciudad. Lejos de mejorar, las entidades han alertado que es un fenómeno creciente, indicando que en solo 8 años ha habido un incremento de casi un 40% de las personas que duermen en el espacio público o en albergues de Barcelona.
Las entidades han indicado que desde 2011 sigue habiendo una tendencia ascendente del sinhogarismo en Barcelona, con un total de 3.696 personas en esta situación durante el 2019. De estas, 1.027 personas pernoctan en la calle y 498 viven en asentamientos, las situaciones de exclusión más visibles. Las otras 2.171 se distribuyen entre centros residenciales y pisos de inclusión de la XAPSLL. Las entidades han constatado que este aumento no es un fenómeno local sino que se trata de un problema que afecta a otras ciudades europeas y del área metropolitana de Barcelona.
También se ha querido alertar sobre un cambio de perfil que se está produciendo, incidiendo en el aumento de los jóvenes de entre 18 y 30 años. Según el último informe «Diagnóstico 2019. La situación del sinhogarismo en Barcelona. Evolución y jóvenes en situación de sinhogarismo», el 17,9% del total de personas que duermen en la calle se sitúan en este rango de edad, aumentando en 5,6 puntos porcentuales en 2 años.
Asimismo, se ha alertado de que factores como la precarización laboral, la falta de vivienda asequible, y una ley de extranjería que dificulta el acceso al mercado laboral sitúa a los jóvenes en graves dificultades para construir un proyecto propio.
Ante esta situación, Fina Contreras, responsable del programa de Sin Hogar y Vivienda de Cáritas Diocesana de Barcelona y miembro de la XAPSLL, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía, indicando que el sinhogarismo es siempre una vulneración de derechos que tiene solución. «Tenemos que superar prejuicios y miedos, y aproximarnos con mucho respeto y delicadeza a estas personas: conociéndolos con nombres y apellidos, podremos afrontar un problema que tiene solución. Lo que nos humaniza es la relación», ha indicado Contreras.
Por su parte, la comisionada de Acción Social del Ayuntamiento de Barcelona, Sonia Fuertes, ha hecho un llamamiento a «evitar normalizar el sinhogarismo» y, especialmente, “el hecho de que personas jóvenes estén viviendo en la calle y se vean desprovistas del derecho a la vivienda”. También ha señalado que «hay que hacer una reflexión, más allá de administración y entidades, sobre un modelo injusto que no pone los derechos de las personas en primer plano«, y que ante este problema “solo es posible una solución colectiva”.
Finalmente, Roger Fe, responsable del Área Social de ASSÍS Centre d’Acollida, ha reclamado a las administraciones competentes un desarrollo de políticas públicas que prevengan el sinhogarismo, que se anticipen a la pérdida del hogar y que garanticen el acceso a los recursos adecuados, así como impulsar medidas de acceso a una vivienda pública de alquiler social. «El sinhogarismo es una responsabilidad de todos y cada uno de los miembros de la sociedad, pero sobre todo de los diferentes niveles de la administración (local, autonómico y estatal), que deben poner esta problemática en el centro de su actuación. No puede ser que solo en la ciudad de Barcelona se lleven a cabo políticas de atención y prevención del sinhogarismo, sino que hay que abordar el fenómeno en el conjunto del área metropolitana y los municipios cercanos», indicó. Asimismo, se ha pedido aprobar e implementar la Estratègia Integral per a l’Abordatge del Sensellarisme a Catalunya, y finalmente se ha instado a contar con espacios residenciales para aquellas personas que viven una situación de sinhogarismo, garantizando la perspectiva de género donde hombres y mujeres puedan tener espacios diferenciados.
Fuente: CÀRITAS