Alimentar la fe de los hijos
Marta y Albert: «los padres y la Iglesia tenemos que encontrar nuevas fórmulas de pastoral y seguir acompañando a los jóvenes sin desfallecer»
Marta y Albert se conocieron en una Comunidad de Vida Cristiana (CVX) de la que forman parte desde que tenían 18 años; se casaron y tienen dos hijas: Laia, de 10 años, que acaba de hacer la primera comunión en la parroquia de Santa María de Sants de Barcelona; y Alba, de 8, que comenzará la catequesis el próximo curso.
Como vive la fe en casa?
Transmitir lo que da sentido a tu vida es una suma de muchos elementos. Entre estos, la explicación de la fe en conversaciones, pequeños gestos y hábitos diarios, celebración de las fiestas en clave cristiana y en familia, vivir amando y probando ser felices, entre otros. En casa, cada día bendecimos la mesa, cantamos el buenas noches a las niñas y luego dan gracias, rezan o piden perdón por algo del día. Formamos parte de la CVX-Sagrada Familia y las niñas también nos acompañan a las reuniones mensuales, los retiros o en los encuentros.
¿Por qué los padres deben implicarse especialmente en la formación en la fe de los hijos?
Creemos que como padres debemos implicarnos para ser coherentes con el paso que los acompañamos a hacer; en este caso el de la primera comunión. Durante dos años, Laia ha conocido más quién es Jesús y que hacía. Ha profundizado más en los sacramentos, en las celebraciones compartidas, participando activamente en este camino que ha hecho.
Después de este primer paso, llegar a la confirmación costará más?
Los adolescentes se hacen preguntas sobre moral, sobre la muerte, sobre los sentido. Así, se abren a un mundo donde son especialmente sensibles a las amistades, a la imagen y en las redes sociales, a experiencias sobrecogedoras, a los valores. Es decir, quieren decidir y se cuestionan los valores que les hemos transmitido, buscando la autenticidad entre una gran cantidad de estímulos, de opciones o de mensajes. Es aquí donde los padres y la Iglesia, en un sentido más amplio, tenemos que encontrar nuevas fórmulas de pastoral y seguir acompañando a los jóvenes sin desfallecer: ser críticos, ser una Iglesia más cercana y auténtica, alegre y servicial, que celebra de forma sentida y con una liturgia rejuvenecida.
Entrevista realitzada por Òscar Bardají i Martín para la Hoja Dominical del 9 de junio