4 DE ABRIL

San Isidoro de Sevilla, obispo y doctor de la Iglesia

Día 4 de abril, MARTES SANTO: San Isidoro de Sevilla, obispo y doctor de la Iglesia

Isidoro (560-636) fue hermano de los santos cartagineses Leandro, Fulgencio y Florentina. Después de haber sido educado por su hermano Leandro, le sucedió como obispo de Sevilla hasta su muerte. Reunió importantes concilios, sobre todo el IV de Toledo (635) y ordenó la liturgia hispano-visigótica. Hace de puente entre la cultura eclesiástica antigua y la medieval, sistematizándola hábilmente en 20 volúmenes enciclopédicos (las ‘Etimologías’). Decía sobre el obispo, como un retrato de sí mismo: «El lenguaje del obispo debe ser limpio, sencillo, abierto, ponderado y correcto, dulce y suave; debe sobresalir tanto en la humildad como en la autoridad; debe dar ejemplo de hospitalidad, abriendo a todo el mundo las puertas de casa con caridad y benignidad» (Sobre los Oficios Eclesiásticos).

1. San Isidoro, obispo y doctor de la Iglesia. Fue discípulo de su hermano Leandro y sucesor suyo en la sede de Sevilla, en la Hispania Bética. Escribió con erudición, convocó y presidió varios concilios, y
trabajó con celo y sabiduría por la fe católica y por la observancia de la
disciplina eclesiástica (636).

2. Santos mártires Agatópodo, diácono, y Teódulo, lector. Debido a su confesión de la fe cristiana, en tiempos del emperador Maximiano, y por mandato del prefecto Faustino, fueron arrojados al mar con una piedra atada al cuello. En Salónica, Macedonia (s. IV in.).

3. Muerte de san Ambrosio, obispo, que el Sábado Santo salió al encuentro de Cristo vencedor de la muerte. Su memoria se celebra el 7 de diciembre, aniversario de su ordenación. En Milán, en la provincia de Liguria (397).

4. San Platón, hegumen. Durante muchos años luchó con ánimo invencible contra los destructores de las sagradas imágenes y, con su sobrino Teodoro, organizó el célebre monasterio de Studion. En Constantinopla (814).

5. San Pedro, obispo. Favoreció los comienzos de la orden de Fontevraud y, removido injustamente de la sede, murió exiliado en Chauvigny. En Poitiers, Aquitania (1115).

6. Beato Guillermo Cuffitelli, eremita. Renunció a la práctica de la caza y pasó cincuenta y siete años en la soledad y en la pobreza. En Siclo, Sicilia (1411).

7. San Benito Massarari, denominado el “Negro” por el color de su piel. Fue primero eremita y después entró en la orden de los Hermanos Menores. Se mostró humilde en todo y siempre lleno de fe en la divina Providencia. En Palermo, Sicilia, Italia (1589).

8. Beato Josep Benet Dusmet, obispo, de la orden de Sant Benet. Fomentó vivamente el culto divino, la instrucción cristiana del pueblo y el celo en el clero. En tiempos de pestilencia prestó auxilio a los enfermos. En Catania, Sicilia (1894).

9. Beato Francisco Marto. Consumido por una enfermedad cuando todavía era un niño, brilló por la suavidad de costumbres, la perseverancia en los sufrimientos y en la fe y también por la asiduidad en la oración. En la localidad de Aljustrel, cerca de Fátima, Portugal (1919).

10. Beato Cayetano Catanoso, presbítero, que instituyó la Congregación de las Hermanas Verónicas de la Santa Faz, para el alivio de los pobres y abandonados. En Reggio de Calabria, Italia (1953).

► “Abril, si bueno al principio, malo al final”: En este mes las lluvias y las heladas son casi obligadas; si no vienen a principios lo harán a finales.