10 DE JULIO
San Cristóbal, mártir

Conocido como «reprobado» («rechazado») -según la leyenda occidental- después de buscar el soberano más poderoso de este mundo para ponerse a su servicio, él que es alto y fuerte, lo encuentra en forma de un niño que quiere cruzar un río. Él, alto y fuerte, no es capaz de transportarlo. Es el Niño Jesús, el «creador del mundo» que le cambia el nombre: Cristóbal (Christophorus), portador de Cristo.
Patrón de los automovilistas, en Barcelona, el 10 de julio de 1907 se hace la primera bendición de coches en la capilla de Sant Cristòfol del Regomir (Ciutat Vella). «Mucha gente lleva una imagen de san Cristóbal en su coche. En medio del intenso tráfico de la ciudad o por una autopista congestionada, mirando la imagen confiamos llegar sanos y salvos a casa: quién conduce con miedo es más propenso a sufrir accidentes. La confianza es más fuerte que el miedo, y nos hace estar más atentos y ser más responsables en la conducción, con el Cristo que nos lleva» (Anselmo Grün, benedictino y psicólogo).
En julio es gran tabarra el canto de la cigarra