El motivo de esta peregrinación es poder restaurar la antigua capilla del Instituto Mental y la construcción de un nuevo centro parroquial, el cardenal Juan José Omella ha colocado la primera piedra
Este mediodía el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, ha presidido la misa de envío para los cerca de 100 jóvenes de las parroquias de Sant Mateu y Sant Rafael de la Guineueta de Barcelona que caminarán durante 40 días hasta llegar a Lisboa. En la capital portuguesa se llevará a cabo la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), un encuentro mundial de jóvenes en el que participará el papa Francisco. Este peregrinaje tendrá una motivación solidaria: restaurar la antigua capilla del Instituto Mental y la construcción de un nuevo centro parroquial.
El cardenal Omella ha sido el encargado de poner y bendecir la primera piedra dando inicio a las obras. Cada paso de este camino simbolizará un paso más hacia esta restauración. Es por eso por lo que se buscan patrocinadores que donen 1€ por cada kilómetro de ruta que servirá para financiar el proyecto de restauración.
La peregrinación a Lisboa es una parte integral de esta experiencia, ya que representa un viaje tanto interior como exterior hacia el encuentro con la fe cristiana. Durante 1.276 km y 40 días de camino, los jóvenes se sumergirán en la oración, la formación, la renuncia y la vida comunitaria, fortaleciendo su fe y preparándose para un encuentro transformador con el papa Francisco.
Desde la última JMJ en Cracovia en 2016, los jóvenes han estado llevando una cruz metálica en peregrinación a lo largo de más de mil kilómetros, pasando por diversos santuarios y lugares de importancia religiosa. Este símbolo de fe y devoción les ha guiado en su camino espiritual y ahora los lleva a Lisboa, donde podrán reunirse con el santo Padre y experimentar la alegría de encontrarse con Cristo en la Iglesia.
Esta peregrinación representa una oportunidad única para los jóvenes del barrio, así como para el proyecto de las parroquias de Sant Mateu y Sant Rafael de la Guineueta, que quieren recuperar el patrimonio histórico, cultural y de fe del barrio y que su templo se convierta en un lugar de encuentro de todas las entidades de la zona.