El Seminario, comunidad de referencia
El cardenal Juan José Omella y el obispo Agustín Cortés inauguran un nuevo curso en el Seminario Conciliar de Barcelona que estrena nuevo rector
Con caras nuevas, incluidas algunos formadores, se ha iniciado el curso 2018-2019 en el Seminario Conciliar de Barcelona. El 17 de septiembre la comunidad de formación de los futuros sacerdotes de las diócesis de Barcelona y Sant Feliu dio el disparo de salida al nuevo curso con un gozoso encuentro fraterno. Hubo discursos motivadores, una festiva cena de hermandad y momento central la celebración solemne de la Eucaristía.
«Necesitamos pastores»
El cardenal Juan José Omella, acompañado del obispo de Sant Feliu, Mons. Agustí Cortés, y los obispos auxiliares de Barcelona, ejerció de maestro de ceremonias. Con la simpatía y el buen humor que lo caracterizan dirigió a los seminaristas. «Debéis estudiar mucho -recordó-, pero más que eruditos, la Iglesia hoy necesita pastores, y esto sólo se consigue con mucha oración».
El cardenal insistió, en la importancia de la fraternidad, bien condimentada por la alegría y el perdón. En esta misma línea, el obispo de Sant Feliu subrayó que el Seminario debe ser, «ante todo, comunidad de vida y comunidad de referencia» para la diócesis. «El tiempo de Seminario constituye una especie de catecumenta sacramental y ha tener un peso decisivo en su vida». «El Seminario -añadió- no es una residencia de estudiantes, sino que es una familia, una pequeña Iglesia doméstica, donde se inicia la espiritualidad sacerdotal, que es sobre todo espiritualidad de comunión. »
Nuevos cargos
El encuentro sirvió, también, para que los nuevos formadores, Mn. Felip-Juli Rodríguez y Mn. David Álvarez, juraran el nuevo cargo, al tiempo que hacían públicamente la profesión de fe. El nuevo rector del Seminario, Mn. Felip-Juli, recordó la importancia de ser de Cristo y de la Iglesia en favor del mundo. «El mundo necesita pastores que den la vida como Cristo». «Un invito -acabó diciendo- a compartir, en este tiempo de Seminario, lo mejor de vosotros mismos, no las oscuridades, porque la relación con el Señor sólo es prueba con la relación entre nosotros».