Cáritas reclama a Barcelona medidas para garantizar los derechos de los niños más vulnerables
Con motivo del Día Internacional de la Infancia la entidad se exige la prevención y protección de los derechos de los níños y adolescentes

En el marco de la celebración del 20 de noviembre, Día Internacional de los Derechos de la Infancia, un centenar de participantes procedentes de más de 40 Cáritas Diocesanas de toda España se han dado cita estos días en Tiana, en un Encuentro Confederal de Infancia, Adolescencia y Familia.
Con encuentros como este, Cáritas apuesta por seguir visibilizando la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran muchos niños y niñas, y reclama medidas urgentes que permitan y garanticen su protección y sus derechos. En este sentido, durante las jornadas se han analizado los retos y estrategias de acción social que se desarrollan en toda la Confederación Cáritas con la infancia, la adolescencia y la juventud, para combatir la transmisión intergeneracional de la pobreza, así como tomar conciencia de cuáles son las necesidades actuales.
Acto de sensibilización
Durante el encuentro se ha constatado que la precariedad fue especialmente dura durante la pandemia, donde los niños, niñas y adolescentes fueron invisibilizados. Esta realidad de ocultación de la infancia ha querido ponerse de manifiesto por medio de un acto público de sensibilización, que hoy ha tenido lugar ante la Sagrada Familia de Barcelona, y que tenía por lema “Dando la lata, la infancia importa”. Durante el acto, varias familias y jóvenes han realizado una batucada, se han pintado latas con mensajes en favor de la infancia, se han cantado canciones de rap y se ha leído un manifiesto para cerrar el encuentro.
Como señala Carmen García, responsable del Programa de Infancia de Cáritas Española, “esta crisis ha privado a muchos niños y niñas de sus infancias y adolescencias, de su tiempo, de su espacio de seguridad y confianza tan importantes en sus procesos vitales. Lo grave es que les está invisibilizando, con el riesgo de privarlos de sus derechos y de las expectativas de presente y futuro”. “Urge tomar medidas –añade– para evitar que esta etapa vital marcada por la pandemia pase una factura social y emocional a sus procesos de desarrollo e identidad personales y sociales”.
En el caso de las diez Cáritas con sede en Catalunya, durante el 2020 acompañaron a casi 75.000 familias con niños a cargo, casi el doble de familias con hijos que el año anterior. Además, 5.200 personas participaron en proyectos dirigidos a familias e infancia de Cáritas en Catalunya durante el 2020. Se han destinado 6,1 millones de euros a 226 proyectos dirigidos a familias e infancia, con el objetivo de acompañar en todos aquellos ámbitos en los que sea necesario. Los proyectos se centran, sobre todo, en intervenciones socioeducativas dirigidas a garantizar el disfrute de un ocio saludable, el derecho a la participación y a sentirse escuchados, el acceso a una educación de calidad e inclusiva, el derecho a tener una familia que los quiera y, en definitiva, el derecho de todos los niños y sus familias a ser felices.
Los más vulnerables entre los vulnerables
Ante la celebración del Día de la Infancia, Cáritas ha alertado de que el aumento de la vulnerabilidad y la exclusión social provocadas por la pandemia, aunque se ha dado de forma generalizada en el conjunto de la población, ha tenido un impacto especial en los niños, niñas y adolescentes, sobre los que la transmisión intergeneracional de la pobreza, lejos de frenarse, se ha incrementado a causa de la crisis.
La pobreza infantil, o la llamada pobreza de las familias con hijos e hijas, lamentablemente es una realidad en España. Con una tasa del 27,4%, una de las altas a escala europea, después de Rumanía y Bulgaria, supone que más de 2 millones de niños y niñas se encuentran en esta situación, es decir, uno de cada cuatro niños o niñas vive en situación de pobreza en España.
La pobreza y la exclusión social son fenómenos estructurales en nuestro país, donde tener hijos e hijas menores de edad es una “carga” para las familias cuando no tienen apoyo o cuando son insuficientes. Por eso, cuando se habla de pobreza infantil, se habla de la pobreza de las familias con hijos, dado que las familias con menores de edad a cargo incrementan el riesgo de exclusión social: del 18% en el caso de parejas sin hijos se pasa a un 27% cuando se trata de parejas con hijos. Esta incidencia se dispara si se trata de una familia numerosa (47%) o un hogar monoparental (49%), especialmente cuando la persona sustentadora principal es una mujer, que es lo que suele ocurrir mayoritariamente con este tipo de familias.
Apuesta por el acompañamiento y la escucha
Una de las estrategias prioritarias de Cáritas para evitar la transmisión intergeneracional de la pobreza y luchar contra la pobreza infantil se basa en la escucha activa para que las familias se sientan acompañadas. Esta apuesta exige medidas y propuestas integrales, donde la prevención y protección de los derechos de la infancia y la adolescencia sea el eje fundamental de toda la intervención.
Fuente: Càritas Barcelona