Barcelona celebra el 75 aniversario de la entronización de la Virgen de Montserrat
La Catedral acoge la imagen de la Moreneta que llega en procesión desde la basílica de Sants Just i Pastor
Fotografías: Catedral de Barcelona
Con motivo del setenta y cinco aniversario de la entronización de la Virgen de Montserrat, el arzobispado de Barcelona ha celebrado una misa de acción de gracias a la Catedral de Barcelona con la Virgen de Montserrat en el altar. La morenita ha llegado en procesión desde la Basílica de los Santos Justo y Pastor, pasando por las callejuelas del gótico hasta la Catedral.
La celebración ha estado presidida por el arzobispo de Barcelona, Card. Joan Josep Omella acompañado de los obispos auxiliar, Mons. Sergi Gordo y Mons. Javier Vilanova. Concelebrando, junto al Capítulo de Canónigos y los presbíteros de la archidiócesis, destacaba el Padre benedictino y párroco del Santuario de Montserrat, Joan Maria Mayol.
Cumpleaños con toda la ciudadanía
Esta celebración se incluye en el abanico de actos que ha organizado la Abadía de Montserrat con el fin de celebrar el aniversario con toda la ciudadanía. Con la intención de acercar a Montserrat a las diferentes diócesis catalanas, la Abadía ha organizado una misa de acción de gracias a cada una de sus sedes episcopales de Cataluña. Después de pasar por Tarragona, Sant Feliu de Llobregat y Vic, este 8 de septiembre la Virgen ha llegado a Barcelona, concretamente a la Catedral. Ha llegado por la puerta de Sant Iu, donde le esperaban el Cardenal con los obispos auxiliares y el Capítulo precedida de un séquito de presbíteros y devotos.
Entre la procesión, destacaban especialmente, los miembros de la Hospitalidad de Lourdes, con esta profunda vocación mariana, y los fieles de la Basílica de los Santos Justo y Pastor de la Comunidad de Sant’Egidio, donde se creó una de las primeras delegaciones de la cofradía de la Moreneta. Ambas entidades con un vínculo con la Abadía y la Virgen de Montserrat presente en la historia. Así lo ha expuesto el P. Joan Maria Mayol en la celebración.
Un símbolo de reconciliación social
En su intervención, el padre benedictino que ha repasado la historia de la Virgen de Montserrat y el vínculo con Cataluña. Ha recordado especialmente el motivo de esta fiesta, es decir, la entronización, en 1944, en la que se reabrió el Santuario y se ofreció a la Virgen un nuevo trueno de plata «para darle un lugar digno y hacerla más accesible en la veneración de los peregrinos», explicaba. Un momento de fiesta, que supuso «un proyecto para avanzar unidos hacia un futuro mejor las fiestas quisieron tratar de superar la división social». De aquí -ha explicado Mayol- al trueno se le llama «el trueno de reconciliación».
Con estos antecedentes, Joan Maria Mayol ha expuesto cómo esta conmemoración «quiere ser un recuerdo que se convierte en homenaje a toda una generación que hizo de las fiestas de la entronización de la Virgen un signo de renovación espiritual y un símbolo de reconciliación social que unieron a Montserrat y el anhelo de renacimiento de Catalunya para salir de la posguerra».
Aprender a mirar cómo la Virgen María
El Cardenal Omella, en el momento de la homilía, ha agradecido a P. Mayol ya todos los padres benedictinos este propósito de «promover la devoción» hacer llegar a la Virgen a todo el territorio. Ha instado a todos los fieles a aprender a mirar como la Virgen María, con «realismo, profundidad y trascendencia». «Ante el dolor debemos procurar una mirada de esperanza», ha dicho. Un testimonio esperanzador ante la realidad que nos rodea, con una mirada positiva y misericordiosa con los demás.