Una parroquia en medio de la diversidad
La Madre de Dios del Carmen, un templo novecentista con una gran fuerza social

Escondida en medio de las callejuelas del Raval se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen que esta semana celebra la fiesta patronal de la parroquia, una parroquia que erigirse en el 1835.
Historia
Tal como explica el rector de la parroquia Mn. Ramón Novell, se edificó junto con la Iglesia del Pi, la del Belén, San Pablo, San Agustín y Santa Ana. Debía ubicarse justo donde había un convento de Carmelitas, pero como fue derribado, se situó en uno Jerónimas, aún así mantuvo la advocación que se le quería dar de la Virgen del Carmen.
Durante la Semana Trágica (1909) fue quemado, y el obispo Juan José Laguarda mandó reconstruirla, y se puso la primera el 16 de noviembre de 1913.
Arte interior
El templo es de estilo novecentista, es de Josep Mª Pericas y Morros, discípulo de Gaudí, y destaca tanto por su arquitectura modernista, que se percibe en sus vidrieras, según Mn. Novell, «una de las obras modernistas más destacadas de Barcelona». También es de admirar la ornamentación interior de cerámica, los detalles artísticos que recorren las fachadas y las pinturas, de la mano de Darius Vilàs.
Multiculturalidad
Hoy en día, la parroquia convive en un barrio multicultural, con un 30% de gente procedente de Pakistán, un gran número de filipinos, sudamericanos, y guineanos y autóctonos de toda la vida. Cada dos meses hay un encuentro entre los miembros de las diferentes religiones. Se llama el Grupo Interreligioso del Raval, con quien se reúnen cada dos meses y celebran algunas fiestas en común como la Navidad.
Acción social
Además de las actividades que comprende la parroquia, como el grupo de liturgia, consejo parroquial, la catequesis y las celebraciones, se desprende también, un puñado de acciones sociales, donde la feligresía está implicada. Un centro cultural donde se llevan a cabo actividades de todo tipo, esplais para los jóvenes, Raíces, la Escuela Intra, son alguno de los apartados dedicados a ayudar a los necesitados ya dar formación.
Por otra parte, destaca también la parte de Cáritas Diocesana, que para adaptarse al barrio ofrece principalmente un servicio de asesoramiento jurídico para ayudar a los recién llegados, o aquellas familias más vulnerables.