Una parroquia afortunada

Una comunidad solidaria que se sumará el próximo año a una nueva actividad con la asociación 'Punto de Referencia', con jóvenes ex tutelados

Como cada año, a finales de octubre, se ha celebrado la fiesta patronal de la iglesia de la Virgen de la Bonanova, también conocida como la parroquia de San Gervasio y Protasio. Esta encuentra sus orígenes en una pequeña capilla del siglo XIII.

Historia de los patrones

El culto concretamente comenzó a una casa señorial que había en la misma zona, la cual pertenecía a un noble llamado Pere de Montjuïc. En esta casa había una capilla, que tenía como patrones Gervasio y Protasio, dos soldados romanos gemelos procedentes de Milán. Según explica el rector de la actual parroquia, Mn. Carles Sauró, fue San Ambrosio quien encontró las actas delos sus martirios e hizo la primera basílica. Años después, su devoción se extendió, llegando a Barcelona.

Gervasio y Protasio son copatrones junto con la Virgen de la Bonanova, que fue escogida años después por su acogida entre los pescadores. Según los archivos históricos, en el siglo XVII ya se veneraba la Virgen de la Bonanova. «Hacia allí en 1600 -explica Mn. Sauró – ronda una devoción a la madre de Dios, pero, no le dicen de la Bonanova, sino de los afortunados. Y justo en el altar hay un barco, para que cuando los pescadores regresaban después de una situación difícil, subían y se sentían afortunados. En 1900 el Papa León XIII declaró copatrones Sant Gervasi y la Virgen de la Bonanova».

Una comunidad de comunidades

La parroquia está muy transitada, y este es un factor clave para que las actividades funcionen y se desarrollen con éxito. «Con los años la zona, se ha ido configurando como barrio. Ha habido un gran interés popular, por parte de diversas entidades, pero la gran solución ha sido la plaza que se ha rehabilitado. Tiene un carácter muy de barrio, con la afluencia de escuelas, con una gente de un nivel cultural muy aceptable, gente de clase media y está muy abierto a todo tipo de actividades «, añade el rector.

Entre las actividades, está el consejo pastoral, el consejo de economía, Cáritas, comunicación con el banco de alimentos, etc. La mayor parte de actividades van encaminadas a ayudar a los más vulnerables. Aunque de entrada no parece haber gente pobre, Mn. Carles Sauró asegura que «pasan por invisibles y los tienes que ir a buscar».

Los feligreses participan con la organización de las actividades y forman parte del voluntariado, con las diversas tareas que se desarrollan en este barrio donde hay mucha actividad alrededor. Según explica el Àngel Pérez, algunos miembros de la comunidad destinan su ayuda a parroquias de barrios más vulnerables, como colaborando con los bancos de alimentos de otros arciprestazgos.

Nuevos propósitos

Por otra parte, una actividad que ahora se pondrá en marcha es el «Punto de Referencia», que comenzará en enero. Se trata de una asociación que recoge chicos y chicas extutelados, a mayoría de los que no sabe hacia dónde ir y que hacer, por lo que reciben personas que los acompañen y los puedan hacer de referente.

Misa Patronal

En la celebración en honor a la patrona, que tuvo lugar el último domingo de octubre, el Obispo Auxiliar Sebastià Taltavull, hizo referencia durante la homilía a esta virgen de la Bonanova, según dijo un doble modelo de «el amor hecho misericordia «. Unas palabras que llevan el sentido de «hacer encuentro con el otro para acogerlo, acompañarlo, servirlo, rehabilitarlo y, incluso, curarlo». Precisamente, la actitud que parece guiar la comunidad de la parroquia de la Virgen de la Bonanova.

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