Sirvienta de Dios
Entrevista al Hno. Mariano Santamaria, marista y postulador diocesano de la Causa de beatificación de Rosa Deulofeu

El 13 de julio tuvo lugar la apertura diocesana de la Causa de beatificación de Rosa Deulofeu. Este es el segundo paso más importante del proceso. Ahora, el tribunal constituido debe tomar declaración a todos los testigos que considere para probar las virtudes de Rosa. El Hno. Mariano Santamaría, marista y postulador diocesano de la Causa, destaca la carta de despedida de Rosa dirigida a sus compañeros, en la que se manifiesta «como una persona humana y en la confianza del Señor», y les dice «[ …] estoy con miedo y nerviosa… necesito de ti, Señor».
¿En qué punto está el proceso?
El tribunal interrogará testigos. También debe recibir pruebas documentales que certifiquen su vida de fe y de entrega a Jesucristo. Ahora toca trabajar para instruir el proceso con arreglo a las normas establecidas para que después la Congregación de los Santos la declare venerable.
Es muy complicado y lento conseguirlo. ¿Por qué?
Desde enero de 2009, cuando se anunció la causa de canonización, se han ido cumpliendo los requisitos que pide la Congregación de los Santos, como recoger todos los escritos publicados y privados de Rosa. Ya se han recogido 550. Se pidió el plácet a los obispos de la Tarraconense para introducir la causa y se solicitó el nihil obstat a la Congregación de los Santos.
Rosa era una persona objetivamente buena. Que todo el mundo hable bien de ella, ¿no debería ser definitivo?
Su frase «esto antes de exponerlo lo tengo que pasar por mi corazón», ¿es suficiente para la Iglesia? No, porque la Iglesia tiene que disponer de pruebas objetivas para proclamarla venerable, beata o santa. La Iglesia evita influencias y sentimientos; no pone condecoraciones, propone modelos a imitar.
Entrevista realizada por Òscar Bardají y Martín para la Hoja Dominical del próximo domingo 20 de septiembre de 2015.