San Cristóbal y bendición para alejar los accidentes
Durante el día de esta larga tradición, coches, motocicletas, taxis, camiones y bicicletas esperan pacientemente para recibir el agua bendecida y la lavanda
La basílica de la Purísima Concepción ha vivido este jueves la bendición de vehículos que cada 10 de julio se celebra en memoria de San Cristóbal.
El vicario de la parroquia, Mn Joan Bladé, explica los orígenes de esta larga tradición y la historia que esconde este Santo.
«Cristóbal se dedicaba a trasladar personas de un lado al otro del río. Siempre con gran espíritu caritativo. Una vez, transportando a un niño, se dio cuenta de que pesaba mucho, no lo podía comprender. Al preguntarle el motivo, el niño le respondió la verdad para agradecerle su caridad: soy el niño Jesús «, narra el vicario.
Volante, medalla y lavanda
Por la mañana de 10 a 12h, y por la tarde de 18:00 a 20:00, el presbítero bendice a todos los vehículos que van pasando por la basílica. Coches, motos, taxis, camiones y bicicletas esperan pacientemente para recibir el agua sagrada y la lavanda. También recibe la bendición el conductor que lo desea.
Por otra parte, los voluntarios entregan una pasta de almendras en forma de volante, una medalla, y una estampa a todos los conductores que hacen una pequeña donación. Para muchos de ellos se trata de una tradición que siguen desde hace muchos años.
Devotos
Según una devota de San Cristóbal, Nuria, «siempre vengo muy contenta, cuando no lo hago, me queda algo dentro. Con mi padre ya íbamos a bendecir el coche. Me hace mucha ilusión «. Para Ricardo Mañes, bendecir el coche o la moto «me hace sentir más seguro». José María Fitó añade que «necesito la gracia y la bendición de Dios para evitar accidentes».
Con la ayuda de San Cristóbal, con mucha atención al volante i con respecto a la carretera, la basílica espera poder recibir a todos estos conductores el año que viene.
