Paella y espectáculo para despedir Lourdes
El Cardenal Sistach preside la Misa Internacional ante miles de peregrinos de diferentes nacionalidades

El domingo ha sido un día especialmente emotivo del peregrinaje a Lourdes, ya que todos los peregrinos se han juntado para comer unidos en un recinto del santuario una paella gigante para poner punto y final a unos días cargados de emociones y convivencia.
Misa Internacional
Previamente, a primera hora de la mañana, la mayoría de los hospitalarios han asistido a la famosa misa internacional en la iglesia de Pío X. Esta, que ha reunido a gente de diversas nacionalidades, ha sido presidida por el cardenal de Barcelona, Lluís Martínez Sistach.
La homilía se ha desarrollado en catalán, castellano, francés, inglés, italiano y alemán, y ha ido dedicada parte de ésta a la figura del apóstol San Pedro, por ser el día de su onomástica. Por otra parte, ha mencionado el bien de la acción del Papa Francisco, para quien pidió las oraciones de los asistentes. En el momento de las peticiones, un miembro de la hospitalidad ha pedido en catalán para los más necesitados.
Paellada para comer
Nada menos que dos sartenes inmensas han sido la comida de los hospitalarios en este cuarto día, que ha ido servida por los mismos voluntarios y escolares del viaje, los cuales han compartido al lado de aquellos con los que han convivido y ayudado los últimos días. Después de que el Cardenal Sistach bendijera la comida, todos los peregrinos han disfrutado de un arroz preparado por un catering venido de Barcelona. Momentos que han servido para recordar y compartir todas las experiencias vividas estos días.
Espectáculo en familia
El plato fuerte ha sido después del postre. Se han representado una serie de actuaciones musicales en las que han participado los escolares, el grupo de animación, así como algunos miembros masculinos de la Hospitalidad. Se han escuchado bandas sonoras de películas míticas como Pulp Fiction o Grease puestas en escena por los más jóvenes del peregrinaje con unas coreografías que han sorprendido a todos los asistentes. No ha sido menos la actuación de los hospitalarios, todo un homenaje a la cultura de Cabaret, una exhibición de talento en el escenario que ha levantado del asiento a los espectadores, que hacían esfuerzo para conseguir la mejor fotografía. Han sonado otras canciones como la de «Boig per tu» así como una versión catalana de la canción de la banda sonora de ‘El meu millor amic’, I say a Little prayer (Yo hago una pequeña oración), en formato gospel representada y preparada expresamente por el grupo de animación. Por la tarde, muchos han aprovechado para ir a hacer las últimas compras para los familiares y de paso han visitado el pueblo que hay fuera del santuario.