Mons. Taltavull: «Nuestra oferta no se corresponde con la demanda»
El obispo auxiliar de Barcelona participó en el IV Seminario de Estudio sobre el Catecumenado organizado por el Secretariado Interdiocesano de Catequesis de Cataluña y las Islas Baleares

«Niños y adolescentes no bautizados en la catequesis». Así se titula el IV Seminario de Estudio sobre el Catecumenado organizado por el Secretariado Interdiocesano de Catequesis de Cataluña y las Islas Baleares en el Seminario Conciliar de Barcelona.
El acto contó con la participación del obispo auxiliar de Barcelona y presidente del SIC, Mons. Sebastià Taltavull, el delegado de Liturgia de Sant Feliu de Llobregat, Mn. Xavier Aymerich y el responsable para el Catecumenado del SIC, Mn. Felipe-Juli. Esta iniciativa sirvió para ver el momento actual de catecumenado y explicar cómo se debe realizar todo el proceso ante una nueva realidad.
Una nueva realidad
«Antes normalmente la gente se bautizaba de pequeño, cuando aún no se tiene uso de la razón. Ahora nos encontramos con muchas peticiones de bautizo a partir de estas edades y también de edad adulta. Se trata de cómo hacer el bautizo, prepararlo, organizar todo entorno el bautizo para cuando tienen esta edad «, apuntó el obispo Taltavull.
Para hacerlo en formato de seminario, el obispo Taltavull interactuó con los responsables de catecumenado de diócesis y parroquias y todos los presentes en la Sala Sant Jordi. Un diálogo que sirvió para profundizar y enriquecer las conclusiones que se extrajeron de la conferencia. «He dado unas pautas estadísticas y después he expuesto como nosotros desde nuestras parroquias acogemos estos niños, adolescentes y sus familias. A partir de aquí, la otra pregunta que he hecho es que ofrecemos nosotros, ya que muchas veces nuestra oferta no corresponde con la demanda», analizó.
El papel de la liturgia
Por otra parte, Mn. Aymerich explicó el papel fundamental de la liturgia en el camino catequético de los niños que han de llegar a bautizarse y como ésta es a la vez un reto y una ayuda en este proceso. «En el catecumenado las celebraciones litúrgicas tienen un papel fundamental, ya que no sólo es un itinerario catequético sino que también es litúrgico. Hay una serie de pasos en este camino que no son de contenido de catequesis sino que son celebraciones. Nosotros creemos que en la liturgia, en la celebración, es donde está el núcleo de la vida cristiana», apuntó.
Es un momento de retos para la Iglesia, como dijo Mn. Termes, delegado de catequesis del Arzobispado, no se debe hacer una catequesis de Zara, Corte Inglés y HM, sino que hay que buscar una manera de acercarse a la gente personalizada, una catequesis de sastre.
«Es lo que corresponde al catecumenado, ofrecer un camino de profundización en la fe cristiana, de celebración, de incorporación a la Iglesia, un camino en el que todos damos gracias a Dios por haber acogido el don de Dios», remarcó Mn. Felipe-Juli. Fue un diálogo que servirá a la Iglesia para dar un paso adelante ante una nueva realidad creciente ante la que no se le puede dar la espalda.