Mons. Rogélio Cabrera: «El ABC de la pastoral es un saludo y una sonrisa»
Ell arzobispo mexicano de Monterrey explica su visión de la pastoral en las Grandes Ciudades, y el proyecto que está en marcha para poner una parroquia en un centro comercial para acercarse a los ciudadanos

Porqué considera necesario echar un vistazo a la pastoral de las Urbz?
Hoy es necesario tener la capacidad de discernir que es lo que conviene en este momento. Tenemos muchas luces y muchos apoyos, sobre todo en la figura del Francisco que quiere una iglesia misionera, no una iglesia cerrada en sí misma, él lo ha dicho, una iglesia cerrada es una iglesia enferma.
Hacia dónde debe dirigirse la acción dentro de las Grandes Ciudades?
Hoy las acciones deben ser significativas para la gente, y el significado más importante, es aquel cariñoso y cercano. Yo tengo un lema para la diócesis: el ABC de la pastoral es un saludo y una sonrisa. Es el más básico del encuentro que debemos tener con la gente. La salud de la Iglesia está en la calle.
Las grandes ciudades necesitan el trato personal, que les saludes, los sonrías. Porque hay muchos problemas económicos de familia, laborales… Que estas personas encuentren alguien que los saluda y les sonríe les abre una ventana de respiro.
Los retos son los mismos para todas las diócesis?
Los retos con todo el tema de la globalización pasan a ser los mismos. Aún así cada zona tiene su identidad y sus problemas. Estamos en un mundo plural, donde no todos piensan ni actúan igual y esta versatilidad de la respuesta pastoral es hoy un desafío para todos nosotros.
¿De qué manera se intenta alcanzar estos retos desde Monterrey?
Por un lado, los pastores van a lugares donde no hay edificios, parroquias sin techo. En segundo lugar, por las nuevas zonas urbanas del centro, pondremos parroquias en centros comerciales. Es un reto para ver cómo es percibida allí la vida parroquial. No reducirla a un producto más del mercado, sino, a un acompañamiento de la gente. Habrá espacios de encuentro, sobre todo para que los niños puedan entretenerse sanamente mientras los padres hacen sus compras.