Los valores, en juego
Vuelve la Liga Interparroquial por cuarto año consecutivo con la participación de siete parroquias de la archidiócesis, que competirán durante cinco jornadas de liga para ser campeones del torneo

El fútbol no es sólo un deporte. Va mucho más allá: es también un juego de valores. Esto bien lo saben los participantes de la 4a edición de la Liga Interparroquial, organizada por el Movimiento Cristiano de Jóvenes (MCJ-MUEC), que justo comenzó este domingo en el colegio La Salle de Premià de Mar. Siete equipos, provenientes de siete parroquias diferentes de toda la diócesis, se verán las caras en cinco enfrentamientos que tienen un objetivo común: fomentar la amistad, hacer que el deporte sea una forma de encontrarse y compartir la fe con otros jóvenes que también hacen camino cristiano. Aparte de ser una liga «convencional», se quieren potenciar los valores de la deportividad, la igualdad de oportunidades entre sexos, el saber ganar y perder, siempre haciendo hincapié en la importancia de participar y pasarlo bien conjuntamente .
Una oración de inicio
Para comenzar la jornada de liga, los participantes hicieron una oración todos juntos en la capilla de la escuela. Los capitanes de cada equipo firmaron, como símbolo de fraternidad, una pelota gigante amarilla que luego recorrió la capilla saltando de participante en participante. Un vídeo promocional con imágenes de la Liga del año anterior puso punto y final a un momento de tranquilidad y oración que continuó en el terreno de juego.
Presentación de los equipos y las banderas
Una batucada interpretada por uno de los equipos participantes animó el inicio de esta Liga, mientras las banderas de los equipos ondeaban al ritmo de la música. Poco a poco, todas las escuadras se presentaron ante sus «rivales» y explicaron el por qué de su logotipo. Bien equipados, salieron al campo a darlo todo. Goles no faltaron pero paradas de primer nivel tampoco. Los nervios de los compañeros de equipo se intuían en el aire mientras los árbitros pedían un juego limpio. Esta tensión contenida continuará en la próxima jornada de Liga que tendrá lugar el 22 de febrero.
El equipo All-Star
Puesto que la competición la juegan siete equipos (Premià de Mar, Vilassar de Mar, Mataró, Badalona, San Martín del Clot, Hospitalet y Santa Coloma) y, por tanto, uno de ellos quedaría sin pareja, los organizadores han pensado -como símbolo también de companyerismo- crear un octavo equipo formado por un jugador de cada equipo participante. Así, aunque a veces jueguen como contrincantes, en el momento en que les toque competir como equipo «All-Star» serán compañeros de plantilla y podrán conocerse más fácilmente.
Novedades de la cuarta edición
Cada equipo mixto jugará con seis jugadores en pista, contando el portero. Los sistemas de puntuación y clasificación de la Liga se rigen por dos baremos: el de los resultados y el de «El + Guay». Si el equipo gana se llevará tres puntos, si empata 2 y si pierde 1. Los goles marcados de cabeza puntúan doble y es indispensable que cada equipo lleve un distintivo idéntico en su equipamiento. Además, cuando un jugador cometa una falta deberá elegir entre bailar durante 10 segundos o salir fuera del terreno de juego durante 30 segundos.
Pero el partido también se juega fuera del campo y, en cada jornada de Liga, se valorarán aspectos como la celebración divertida, saber encajar deportivamente los goles en contra, animación de la afición, bailes originales, disfraces, participación de los integrantes del equipo… Todas estas propuestas dan lugar a una nueva categoría de premio: El + Guay.
Resultados de la primera jornada de Liga
Sta. Mª de Premià de Mar – Sta. Coloma de Gramanet: 9 – 5
Mare de Déu de la Salut de Badalona – Equip «All Stars»: 8 – 0