Las palmas y los palmones decoran la Sagrada Familia
La misa de Domingo de Ramos, presidida por el Cardenal Sistach, congrega a miles de personas en las afueras de la Basílica para bendecir las palmas de los más pequeños
Palmones adornados con lazos de todos los colores llenaban la Sagrada Familia este Domingo de Ramos. El Cardenal Sistach entró en la basílica rodeado de niños que, alegres, aguantaban y movían sus palmas para hacerse ver entre la multitud. Al llegar al altar, el Cardenal cogió su palma y se dirigió hasta la salida de la fachada de la Pasión, bendiciendo, a su paso, las hojas de palmera del camino. Allí, la multitud que lo esperaba le dedicaba una gran ovación, hasta que el Cardenal se perdió entre los feligreses que venían a bendecir sus palmas.
Dar todo por el otro
En su homilía, el Cardenal recordó que Jesús murió en la Cruz para salvar a los hombres. «La Cruz es el signo de la identidad cristiana y el del amor fiel de Dios a toda la humanidad», explicó el Arzobispo de Barcelona. Y añadió: «Él siempre está cerca de nosotros y nos quiere acompañar en nuestra vida. Acompañemos nosotros a Jesús en estos días con la oración, con la lectura del Evangelio, participando en las celebraciones litúrgicas de esta semana… Acompañemos a Jesús como lo hizo María al pie de la Cruz porque eso Jesús lo sufrió por todos nosotros».