La transformación misionera de la Iglesia según la 'Evangelii Gaudium'
Mons. Taltavull ha participado con dos ponencias en unas jornadas dedicadas a la exhortación del Papa Francisco que han tenido lugar en Santiago de Compostela

En el marco de las XV Jornadas de Teología de Santiago de Compostela sobre «Perspectivas teológico–pastorales de la Exhortación Apostólica del Papa Francisco Evangelii gaudium», el Obispo Auxiliar de Barcelona y Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral de la Conferencia Episcopal Española. Mons. Sebastià Taltavull Anglada ha participado junto con otros ponentes en la mañana y tarde del día 15 de septiembre con dos conferencias sobre «La transformación misionera de la Iglesia según la Evangelii gaudium». Unas jornadas centradas en la alegría del Evangelio y que ha inaugurado el Arzobispo de Santiago, Mons. Julián Barrio junto con el primer ponente, Mons. Salvatore Fisichella, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, que ha desarrollado su ponencia «De la Lumen fidei a la Evangelii gaudium».
Una Iglesia en salida
En su aportación, Mons. Sebastià Taltavull ha hablado de la necesidad de «llegar a ser discípulos misioneros» tal y como lo está pidiendo el Papa Francisco. Por ello, ha empezado diciendo que el Papa Francisco tiene un proyecto misionero muy claramente elaborado, fundamentado y definido. Su paradigmática expresión «Una Iglesia en salida» que define su vocación misionera, no refiere una Iglesia en huida ni en retirada, sino que nace del Evangelio con la invitación de Jesús de «ir a todos los pueblos», con la intención y la «capacidad de transformarlo todo para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se convierta en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual más que para la autopreservación».
A partir de ahí, Mons. Taltavull ha ido desarrollando el significado y el itinerario de la transformación misionera, presentando el fundamento y el referente clave que es el encuentro con Jesucristo y el eje transversal que son los pobres y la convicción de que tota la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium «huele a Evangelio» e invita a una conversión personal y pastoral que capacita para la misión, que es siempre de amor misericordioso. Es lo que mucha gente espera de
La alegría del Evangelio
Ante la necesidad de un nuevo rostro de Iglesia, hay que hacerlo realidad en nuestras diócesis, parroquias, familias, comunidades religiosas, instituciones, grupos eclesiales y movimientos, y sobretodo, en la actuación de cada fiel. «La pastoral en clave de misión –dice el Papa Francisco– pretende abandonar el cómodo criterio pastoral del «siempre se ha hecho así», sino revisar y transformar desde Cristo. Es el nuevo rostro de una Iglesia de puertas abiertas, desde donde se nos pide «salir» hacia fuera y hacernos presentes en todas las «periferias», débiles con los débiles y todo en todos. Hay un vínculo inseparable entre nuestra fe y los pobres, por eso dice que «no les dejemos solos!». El análisis sobre la profunda crisis que vivimos le hace decir que el dinero ha de servir y no gobernar y que las nuevas relaciones que genera Jesucristo nos llevan a más solidaridad entre todos. La transformación misionera de
Constante evangelización
Después de referirse a la necesidad de contar con el Espíritu y con evangelizadores con espíritu, que rezan y trabajan, ha profundizado en los lugares y personas para la transformación misionera: las parroquias, las instituciones eclesiales, la diócesis y los agentes de pastoral, y al mismo tiempo, la fuerza del desafío cultural y de la inculturación de la fe, junto a la necesidad de transformar desde el Evangelio para curar, promover y afianzar los vínculos interpersonales. La llamada va dirigida a todos: obispos, sacerdotes, religiosos/as y laicado cristiano.
Mons. Sebastià Taltavull ha concluido su conferencia subrayando que la Iglesia necesita ser permanentemente evangelizada para vivir la transformación misionera que tiene que llevar a cabo a partir de la implicación de cada uno de sus miembros e instituciones y hacer realidad la conversión pastoral y misionera, tal y como la propone el Papa Francisco en su Exhortación Apostólica Evangelii gaudium.