La Iglesia de Barcelona con las víctimas del accidente de Freginals
El obispo, Sebastià Taltavull, ha representado a la Iglesia católica de Barcelona en el acto homenaje a los estudiantes víctimas del desgraciado accidente de Freginals en la Universidad de Barcelona
Mons. Taltavull ha querido así manifestar el apoyo y respaldo, así como la oración, los fieles barceloneses por las víctimas y sus familiares. «El corazón del Evangelio, como nos enseña el Francisco, es estar siempre presente especialmente en el lado de los que sufren y más si se trata de un hecho trágico».
El presidente de la Generalidad de Cataluña, Carles Puigdemont, y el rector de la Universidad de Barcelona, ​​Dídac Ramírez, presidieron el acto en memoria de las víctimas mortales del accidente de autocar del pasado 20 de marzo en la localidad tarraconense de Freginals, cuando estudiantes Erasmus de 23 nacionalidades diferentes volvían a Barcelona después de una breve estancia en la capital valenciana. El acto, que ha tenido lugar en el Paraninfo del Edificio Histórico de la Universidad de Barcelona, ​​ha congregado familiares de las víctimas, estudiantes heridos en el accidente y otros compañeros de estudios, así como académicos de la Universidad de Barcelona y de otras universidades europeas, y representantes del mundo político y civil catalán, entre los que se encontraba la alcaldesa de Barcelona, ​​Ada Colau; la presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell; la delegada del Gobierno en Cataluña, María de los Llanos de Luna, y el alcalde de Freginals, José Roncero. También han asistido los consejeros de la Generalidad Jordi Jané, Antoni Comín, Carles Mundó y Jordi Baiget, y el secretario de Estado de Universidades, Marcial Marín.
Las intervenciones de tres de los estudiantes que resultaron heridos en el fatal accidente y la ofrenda floral y de luz que les ha seguido han sido dos de los momentos más emotivos del acto. Los tres compañeros de las estudiantes desaparecidas, alumnos de la Facultad de Economía y Empresa, han querido transmitir a los asistentes y en especial a las familias de las compañeras muertas la experiencia vivida como Erasmus, las ilusiones compartidas, el sentimiento de vacío y la incredulidad por su pérdida. A continuación, y mientras los nombres de las trece estudiantes iban apareciendo en pantalla, alumnos de la Universidad de Barcelona han ido depositando una rosa blanca en cada una de las trece sillas vacías dispuestas a la presidencia, a los pies de las cuales había una vela.
El presidente de la Generalidad de Cataluña, Carles Puigdemont, ha concluido el acto con las palabras: «Vuestras hijas nos dejaron de manera prematura e injusta, cuando apenas comenzaban un proyecto de vida que merecían, merecíais, que fuera largo y feliz. En estas horas tristes surgió lo mejor que tienen las sociedades decentes, la fraternidad, la solidaridad, la amistad, el amor ».
Para el acto se han desplazado a Barcelona diez de las trece familias afectadas. Instantes antes del homenaje en recuerdo de sus hijas, el rector les ha entregado un ejemplar del libro de condolencias que desde la misma tarde del día del accidente recogió las muestras de solidaridad, afecto y homenaje de compañeros, profesores y numerosos ciudadanos.
