La Familia: ¡Esperanza del mundo!

Con motivo de la celebración de la Semana de la Familia, del 1 al 9 de marzo, las Delegaciones de Pastoral Familiar de las diócesis catalanas han hecho público un manifiesto donde remarcan el papel de la familia en la vida de la comunidad creyente y en l

Se han editado distintos materiales, carteles, puntos de libro, oraciones, para ayudar a las parroquias y comunidades cristianas a orar y celebrar la familia como Iglesia doméstica y vivir la Iglesia como familia de familias.
El manifiesto constata que la institución familiar es la más valorada en todas las encuestas y, en las actuales circunstancias de crisis económica, lo es aún más, ya que ahora «la familia es la institución que ha dado acogida, solidaridad y refugio a muchos que se han quedado sin los recursos más necesarios de subsistencia, ya veces sin esperanza». También la valoración sobre la familia se sustenta en un importante aspecto ni material ni coyuntural «la familia comunica el don más preciado: la vida. También los valores, la pertenencia a la sociedad”, dice el manifiesto.
El Papa Francisco ha hablado numerosas veces de la cultura de la exclusión, donde ancianos, enfermos y jóvenes en dificultades son rechazados primero de sus hogares y también del estado del bienestar de la sociedad, por eso el manifiesto recuerda que «en la familia cada uno de sus miembros realiza una misión . Todos son importantes. Los padres, con su testimonio de amor fiel. Los hijos como fuerza de presente y esperanza de futuro, los abuelos como testigos de la memoria histórica, transmisores de la sabiduría de la vida y de la importancia de las tradiciones». La unión familiar, el respeto y acogida a todos y cada uno de sus miembros tiene una raíz» una comunidad de vida y amor. Amor que encuentra en Dios su fuente» .
El manifiesto hace mención en la particularidad de la visión desde el Evangelio de la familia: es la Iglesia doméstica, «el lugar de vivencia, del testigo y de la transmisión de la fe» y desde esta clave las palabras de los Delegados de Pastoral Familiar catalanes apuestan por una «Iglesia como familia de familias que vela por la plenitud y crecimiento de la vida que Jesús da a los que le buscan»