Francisco: «¿Qué te ha pasado Europa?»
En el discurso de agradecimiento del Premio Carlomagno a la integración europea el Francisco explicó sus sueños y esperanzas por una Europa que según el pontífice no debe dejar de integrar, comunicar y generar

En sus palabras de agradecimiento en el discurso de agradecimiento del Premio Carlomagno, el Papa Francisco se preguntó «¿Qué te ha pasado Europa humanista, defensora de los derechos humanos, de la democracia y de la libertad?». Recomendó hacer memoria del pasado, aprender de las fortalezas y errores para afrontar el complejo escenario actual que necesita actualizar la idea de Europa. También pidió recurrir a los padres fundadores de Europa para buscar las semillas de un nuevo humanismo que no debe olvidar «la capacidad de integrar, la capacidad de comunicación y la capacidad de generar».
Los 9 sueños:
«Sueño una Europa joven, capaz de ser aún madre: una madre que tenga vida, porque respeta la vida y ofrece esperanza de vida.
Sueño una Europa que se hace cargo del niño, que como hermano ayuda al pobre y los que vienen buscando acogida, porque ya no tienen nada y piden refugio.
Sueño una Europa que escucha y valora los enfermos y los ancianos, para que no sean reducidos a objetos improductivos descartables.
Sueño una Europa donde fue emigrante no sea un delito, sino una invitación a un mayor compromiso con la dignidad de todo ser humano.
Sueño una Europa donde los jóvenes respiren el aire limpio de la honestidad, amen la belleza de la cultura y de una vida sencilla, no contaminada por las infinitas necesidades del consumismo:
Donde casarse y tener hijos sea una responsabilidad y una gran alegría, y no un problema por la falta de un trabajo suficientemente estable.
Sueño una Europa de las familias, con políticas realmente eficaces, centradas en los rostros más que en los números, en el nacimiento de hijos más que en el aumento de los bienes.
Sueño una Europa que promueva y proteja los derechos de cada uno, sin olvidar los deberes con todos.
Sueño una Europa donde no se pueda decir que el compromiso por los derechos humanos ha sido su última utopía”.
Fuente: OPUS DEI