Francisco comienza a hacer reformas
El Santo Padre refuerza las normas de jubilación de los obispos en caso de que tengan más de 75 años o por motivos debidamente justificados

La Santa Sede ha hecho pública la disposición Rescriptum ex audientia, después de la audiencia del Papa con el Secretario de Estado Pietro Parolin sobre la renuncia de los obispos diocesanos, coadjutores, auxiliares y eparquiales. Por medio de esta renuncia, el Papa Francisco estará legitimado para pedir la jubilación a todos aquellos obispos mayores de 75 años o la renuncia de cualquier obispo, siempre que existan razones plenamente justificadas.
Ser obispo, un servicio y no un honor
El Rescriptum consiste en una fuerte revisión de las normas ya establecidas y una llamada a poner en práctica la invitación del Papa de considerar el espiscopado como una vocación profesional y no como un mérito.
Este documento, que entra en vigor a partir de este jueves por la tarde, quiere hacer comprender la gran importancia del papel de los obispos en nuestra sociedad. Francisco pide todas sus energías, para que éstos afronten los retos del mundo actual a través de una gran competencia, habilidades y dotes humanas y espirituales.
Una disposición que iniciará la reforma de la Curia romana y del gobierno de la Iglesia
El Rescriptum ex audientia recoge todas las recomendaciones del Consejo de Cardenales que asisten al Papa Francisco, comenzando de esta manera la reforma de la Curia romana y del gobierno eclesial.
Precisamente, uno de los puntos más progresistas de esta disposición radica en el derecho que tienen el Papa y la autoridad competente a pedir, en circunstancias especiales y cuando lo consideren necesario, a un obispo que presente la renuncia a todos sus cargos en la oficina pastoral. El traslado de la petición de renuncia deberá justificarse con unos motivos razonados y siempre bajo un diálogo fraterno.