El GTER se abre a las nuevas tecnologías
Con motivo de la Semana de la Armonía Interconfesional, el Parlamento acogió una sesión de trabajo del GTER, bajo el título 'Pasado, presente y futuro', en el que se lanzó la primera 'app' de diálogo interreligioso

El Grupo de Trabajo Estable de las Religiones (GTER) se reunió, por cuarta vez consecutiva y con motivo de la Semana Mundial de la Armonía Interconfesional, en el Parlamento de Cataluña para analizar con varias conferencias la tarea social de la entidad durante sus 10 años, la libertad de expresión y religiosa o la contribución que pueden hacer las religiones ante los retos sociales.
En el inicio del acto, el presidente del GTER, Guillem Correa, hizo el lanzamiento de una nueva app que «tiene vocación de servicio y es la primera de diálogo interreligioso que se ha creado» en la que se podrán encontrar actos y actividades que cada comunidad quiera ofrecer abiertamente, así como las noticias más destacadas relacionadas con el GTER. Este martes, por tanto, se recordará como el día que la entidad se ha abierto a las nuevas tecnologías.
Entendimiento entre religiones, tarea también del Parlamento
De entre todas las felicitaciones que recibió el GTER, la más especial fue la de la presidenta del Parlamento, Núria de Gispert, quien situó el hecho religioso «en el centro de la sociedad». La política instó a las comunidades religiosas de Cataluña a trabajar para que «la convivencia y la cohesión social no se rompan», y al GTER, a seguir siendo «el cobijo que evite que haya una sociedad dividida o partida» por motivos religiosos.
Bromeando, de Gispert recordó que es la cuarta edición de este encuentro y que «ha habido ciertos celos por parte del gobierno, que ha hecho la recepción interconfesional en el Palau de la Generalitat. Nos han copiado», pero ha asegurado que estas sesiones de trabajo en el Parlamento, seguramente, «continuarán en la próxima legislatura».
Intervención política
Además de la Presidenta, en el acto han intervenido los directores de asuntos religiosos de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona, Enric Vendrell e Ignasi Garcia Clavel respectivamente. Ambos han coincidido en que las administraciones no deben promover las religiones, sino ayudar a las diversas confesiones a hacerse visibles.
También ha asistido el secretario primero, Pere Navarro, así como los diputados Maurici Lucena (PSC), Fernando Sánchez (PPC) y Glòria Renom (CiU), y representantes de las diversas confesiones que integran el GTER.
Una mirada transversal
Bajo el título ‘Pasado, presente y futuro’, comenzaron las tres ponencias que conformaban la sesión de trabajo. La Hermana Llum Delàs, ex presidenta de la Fundación Roble, habló sobre el pasado en una ponencia titulada ‘La creación del GTER, un nuevo paradigma de acción’. La psicóloga denunció que todas las noticias respecto a las religiones fuesen malas: «¿No se puede anunciar el bien preciado o la belleza compartida? Las religiones tienen un gran reto y un camino muy seductor por delante». Además, dedicó un mensaje a los políticos presentes en el acto: «Cuidad las minorías porque, aparte de lo que se pueda decir, hay una manera de vivir en la concordia y la armonía».
Del presente habló Mn. Antoni Matabosch, representante de la Iglesia católica en el GTER, quien trató el tema de los límites a la libertad de expresión en el tratamiento del ámbito religioso. Según Mn. Matabosch, hay dos maneras de aproximarse a este tema: la ética y la jurisprudencia. «La libertad de expresión existe en muchas constituciones pero tiene los límites del honor, la intimidad y la propia imagen. La libertad religiosa es, en cambio, la libertad de creer y de no ser perseguido. En este sentido, se han de conjugar los dos derechos, siempre teniendo en cuenta que el humor puede ser ofensivo o motivo de escándalo», comentó el representante católico. También añadió que hay una doble vara de medir porque «hay temas intocables en nuestra sociedad como estar enfermo pero en cambio se excusan las injurias a la religión porque hay un miedo reverencial para limitar la libertad de expresión».
Cerraron el acto la presidenta de la Asociación Intercultural Diálogo de Mujer, Fátima Ahmed, quien trató sobre el futuro con una conferencia titulada ‘La contribución de las religiones ante los retos sociales. ¿Qué podemos hacer todos juntos?’. «La diversidad religiosa no es una cuestión de querer o no querer, sino que es una realidad», concluyó.