El DISA llega al Maresme
Premià de Dalt y Premià de Mar inauguran el nuevo centro de Distribución Solidaria de Alimentos que acoge alrededor de 1600 personas y 450 familias

El primer centro DISA (Distribución Solidaria de Alimentos) del Maresme ya ha llegado y se ha inaugurado, concretamente, en Premià (Premià de Dalt y Premia de Mar). Este sábado 16 de enero todas las entidades, unidas en el proyecto, junto con los voluntarios y fieles, se reunieron en la parroquia de Santa María de Premià. Antes de visitar el nuevo supermercado solidario tuvieron lugar los parlamentos encabezados por los miembros de las diferentes entidades.
Un supermercado para la dignidad
El rector de la parroquia, Mn. Xavier Pich- Aguilera, artífice y para muchos el «motor» de esta iniciativa, fue el primero en hablar. Agradeció todo el esfuerzo realizado a todos los miembros de las entidades que se han sumado a la causa. Recordó cómo empezó todo y cómo se pasó, de un sistema de distribución de lotes cerrados, que funcionaba a las diferentes parroquias por separado (Sant Pere de Premià de Dalt, i Santa María y San Critobal de Premià de Mar), y pasó a ser un proyecto en común.
«Pensamos, por qué no reducimos esfuerzos y maximizamos el servicio, para dar los alimentos en criterios de justicia y cohesión social?» – Explica Mn. Pich Aguilera-. «Así, creamos una tabla de inclusión de servicios sociales, nos juntamos los dos municipios y intentamos crear un espacio único de distribución de alimentos. A través de los servicios sociales hacíamos la entrevista y entonces íbamos a un centro único de distribución de alimentos «.
Se trata de un sistema, que como explica el párroco de Santa María, pretende dignificar a la persona. «Ya no se llevan un lote sino que con una carretilla y van cogiendo lo que la familia necesita y ya no dependen de lotes cerrados. En este sentido hemos logrado dignificar el servicio «añade.
Esfuerzo en equipo
Entre los representantes de las diferentes entidades que intervinieron en agradecimientos tomó la palabra el vicario episcopal del Maresme, Mn. Segimón Garcia, el cual destacó por un lado todo el esfuerzo y dedicación puesta para hacer posible el DISA y por otro la «piña» entre voluntarios y participantes, que se han sumado a la causa con el fin de ayudar a los más necesitados.
También intervinieron el presidente provincial de la Cruz Roja de Barcelona, Josep Quitet y Torné, la Delegada Comarcal de la Fundación Banco de Alimentos Nuria Mantiene, el director de Cáritas Diocesana de Barcelona, ​​Salvador Busquets, así como los alcaldes de Premià de Dalt y Premià de Mar, Josep Triadó y Miquel Buch, respectivamente.
Todos ellos, coincidieron en el triste hecho de la necesidad de un Supermercado Solidario, ya que no corresponde a lo que se espera de un mundo justo con políticas efectivas y de igualdad social. Al mismo tiempo, agradecieron, la suerte que haya la buena voluntad de tantos voluntarios y de las entidades que se han sumado en este proyecto para ayudar a los más vulnerables. Concretamente, el DISA recibe los recursos financieros de los dos ayuntamientos y particulares, y los alimentos del Banco de Alimentos, la Cruz Roja, y de campañas de alimentos y particulares.
Demanda nacional y extranjera
Según explica José Manuel Barreto, coordinador del DISA, en total se atienden unas 450 familias que supone unas 1.600 personas. «La situación en auge y el perfil ha cambiado. Antes eran un 60% de los usuarios eran de fuera y un 40% nacionales. Ahora, sin embargo, es a la inversa «, explica Barreto.
Después de unos bailes por parte de los Gegants de Premià de Dalt y los de Premià de Mar, todos los asistentes a la inauguración se dirigieron hacia las instalaciones del DISA al ritmo de la batucada del grupo de los Trencaones de Premià de Mar. Voluntarios y personalidades visitaron el nuevo supermercado solidario que ha estado en marcha durante tantos años, pero que comenzó a construirse hace menos de un año.
Ahora ya se ha inaugurado, aunque ya desde septiembre ofrece servicio regular las tardes del lunes y las mañanas del miércoles y viernes a tantas y tantas personas. Con el esfuerzo de todos los voluntarios y todas las entidades se hace posible así un paso más hacia la dignidad y la justicia social.