El Cardenal Sistach clausura el Congreso Internacional «Cine y Nueva Evangelización»
El Cardenal arzobispo de Barcelona, ​​Dr. Lluís Martínez Sistach, clausuró el Congreso Internacional «Cine y Evangelización» el pasado 16 de febrero. El Cardenal Sistach dedicó unas palabras a los presentes: Palabras conclusivas del Sr. Cardenal, Dr. Lluís Martínez Sistach, en el Congreso Internacional “Cine y Nueva Evangelización” Barcelona, 16 de febrero de 2013 Clausuramos este [...]

El Cardenal arzobispo de Barcelona, ​​Dr. Lluís Martínez Sistach, clausuró el Congreso Internacional «Cine y Evangelización» el pasado 16 de febrero. El Cardenal Sistach dedicó unas palabras a los presentes:
Palabras conclusivas del Sr. Cardenal, Dr. Lluís Martínez Sistach,
en el Congreso Internacional “Cine y Nueva Evangelización”
Barcelona, 16 de febrero de 2013
Clausuramos este Congreso Internacional “Cine y Nueva Evangelización” que hemos celebrado estos días en Barcelona. Es el segundo después del celebrado en Roma. Nuestra Archidiócesis ha sido pionera en las Semanas del Cine Religioso, que se han extendido por el mundo. Ha sido una feliz iniciativa de nuestro sacerdote diocesano Peio Sánchez que deseo agradecer.
Estas dos iniciativas contribuyen considerablemente en la nueva evangelización. El cine con sus imágenes y sus guiones, su música y sus efectos sonoros, es hoy también un lenguaje comprendido y en uso entre las personas sin excluir los jóvenes. El cine nos ofrece un nuevo lenguaje, actual y comprensible, para anunciar a Jesús y su Evangelio, para la evangelización en países ad gentes y para la nueva evangelización en países como los de la Europa occidental, cristianizados hace muchos siglos pero que actualmente sufren un proceso de descristianización galopante.
Nuestro Congreso ha coincidido con una decisión meditada y libre de nuestro querido Santo Padre Benedicto XVI, al declarar su renuncia al ministerio de Obispo de Roma y Sucesor de San Pedro. Una decisión inédita durante los casi seis siglos últimos. Decisión inesperada que ha paralizado y ha movido a la vez los medios de comunicación, a la Iglesia y al mundo. La renuncia del Papa Ratzinger, la sede vacante y la celebración del Cónclave ofrecerá muchas imágenes religiosas, eclesiales, que directa e indirectamente hablarán de transcendencia, de sentido religioso innato en la persona humana, de Dios. Se coincide en que el gesto de Benedicto XVI ha sido un testimonio para la Iglesia y para el mundo hoy.
Ha sido precisamente Benedicto XVI quien, preocupado por la nueva evangelización, ha creado un nuevo dicasterio en la Curia Romana sobre la Promoción de la Nueva Evangelización y ha dedicado el Sínodo de los Obispos celebrado en octubre pasado al tema de la nueva evangelización para la transmisión de la fe”.
En el Mensaje al Pueblo de Dios, los padres sinodales nos referimos a los medios de comunicación. Dijimos que “la evangelización exige que se preste gran atención al mundo de las comunicaciones sociales, que son un camino, especialmente en el caso de los nuevos medios, en el que se cruzan tantas vidas, tantos interrogantes y tantas expectativas”. Estos medios, y hoy son muchos y más sofisticados, ofrecen un nuevo lenguaje, como el mismo cine, para la evangelización, especialmente de los jóvenes, ya que son éstos los que al menos hoy están más abiertos a estos medios y redes sociales. Asimismo, en el Mensaje dijimos también que estos medios “son el lugar donde en muchas ocasiones se forman las conciencias y se muestran los hechos de la propia vida y deben ser la oportunidad nueva para llegar al corazón de los hombres” (N. 10).
Pero no podemos olvidar que tratando del cine, éste es un arte, ya se le llamaba el séptimo arte en mis años mozos. Y en el referido Mensaje hablamos implícitamente del cine al hablar también del arte en sus varias formas, desde las más antiguas a las más recientes. Así, hemos dicho a cuantos realizan el arte del cine que “en sus obras, en cuanto tienden a dar forma a la tensión del hombre hacia la belleza, reconocemos un modo particularmente significativo de expresión de la espiritualidad… La vía de la belleza es un camino particularmente eficaz de la nueva evangelización” (N. 10).
La Biblia, la liturgia y la espiritualidad cristiana han sido y son fuente de inspiración a artistas para sus obras en todas las ramas del arte. La naturaleza, la Biblia y la liturgia fueron los tres libros –tal como afirmó Benedicto XVI en su homilía de dedicación de la Basílica de la Sagrada Familia- que inspiraron a Antoni Gaudí como hombre, como cristiano y como arquitecto.
Con mucha satisfacción he visto como se ha incorporado en las ponencias del Congreso la figura y la obra de Gaudí en el cine. Da para muchas películas de cine religioso. Gaudí se proponía evangelizar con su gran templo. Lo muestra el hecho de que, con esta intención, proyectara las tres grandes fachadas del Nacimiento, de la Pasión y de la Gloria, que son como tres grandes retablos con imágenes expresivas de la fe cristiana. Pero estos retablos no los coloca en el interior del templo, sino en las fachadas a la vista de todos, como en una visión nueva de las imágenes clásicas, calificadas como la Biblia pauperum, la Biblia de los pobres. Gaudí, como laico cristiano y como arquitecto quería que sus obras condujeran las personas a Dios. Buen testimonio para cineastas cristianos.
Podemos decir que el templo gaudiniano es una cartografía de lo sagrado, un gran mapa donde el mundo puede ver las grandes preguntas de la vida, del origen y del fin, del cielo y de la tierra. Antoni Gaudí conocía que la belleza tenía un poder provocador y atrae hacia la bondad y la verdad. Sabía que su obra invitaba y movía a la fe, que detrás de las piedras del templo había una elocuencia que hablaba del infinito. Sin duda que el documental de Massimo Manservigi “Buscando las siete llaves de Antoni Gaudí” habrá ilustrado suficientemente el servicio que ha prestado, presta y prestará a la nueva evangelización de la obra de nuestro “arquitecto de Dios”.
Agradezco a todos los que han hecho posible el Congreso. Grazie Eminenza, Cardenal De Paolis, siamo amici e colleghi canonisti. Grazie per la sua conferenza. Grazie Dottoressa Liana Marabini, Presidenta del Congresso, per la sua collaborazione. Deseo que el trabajo de este Congreso Internacional haya sido muy eficaz y ayude a todos los que están inmersos en el mundo del cine que este maravilloso arte contribuya a la nueva evangelización al servicio de las personas.