Ejercicios espirituales de los seminaristas mayores de Cataluña
En consecuencia del Año Jubilar de la Misericordia, formadores y seminaristas se reúnen en el Monasterio de Montserrat para llevar a cabo los ejercicios espirituales anuales
Los seminaristas mayores de las diócesis de Barcelona, ​​Solsona, Tarragona y Terrassa, con sus respectivos formadores, se reunieron en el Monasterio de Montserrat del 19 al 21 de febrero, para llevar a cabo los ejercicios espirituales anuales. Han sido predicados por Mn. Francisco García Baca, rector de las parroquias de Monistrol de Montserrat y de Abrera, del obispado de Sant Feliu de Llobregat. Las reflexiones giraron en torno al Año Jubilar con el tema «El fuego transformador de la Misericordia.»
La mayoría de meditaciones y los ratos de silencio posteriores se hicieron en los jardines de los monasterio. Fueron unos momentos para poner la mirada en aquel que ha cautivado la vida de estos chicos, los cuales han sido profundizando en su camino vocacional. También tuvieron la oportunidad de hacer la oración de Laudes en el Cambril, a los pies de la Virgen de Montserrat y el domingo pudieron entrar por la puerta santa para recibir el don de la indulgencia, propia del jubileo de la Misericordia.
Los formadores fueron testigos de cómo el Señor sale al encuentro de estos chicos que hacen un camino de discernimiento. Se podía ver las caras de sorpresa de los chicos, de cómo quedaban maravillados con fuerza de la presencia del Señor. Fue impresionante verlos meditar en los jardines de los monjes, ya que se podía notar que Él estaba presente. También el domingo, cuando visitaron la Santa Cueva de la Moreneta, pudieron experimentar, todos juntos, que la belleza de la creación se hace patente por ella misma y hacía despertar el interés vivo de los seminaristas y sus formadores, de poder vivir sus vidas en entrega absoluta a Dios.
Por último, resaltar la experiencia de vivir, seminaristas y formadores, la convivencia intensa entre todos ellos. Así experimentaron que no están solos en el camino.
Mn. José Fernando Campoverde, formador
