Cardenal Sistach: «Da gusto ver el interés y la participación de arzobispos venidos de cuatro continentes»

El Cardenal Sistach extrae conclusiones positivas del desarrollo de la segunda fase conclusiva del Congreso internacional de las Grandes Ciudades


Cómo se está desarrollando esta II parte conclusiva del Congreso Internacional de las Grandes Ciudades?

Está teniendo mucha participación. Cuando lo organicé tenía cierto miedo a no generar contenidos suficientes. En esta fase los arzobispos nos estamos dejando interpelar por todas las ideas que formularon los técnicos en la primera parte del Congreso. Después de hoy, puedo afirmar que sí lo hemos conseguido. Nos faltará tiempo y todo.

¿Qué temas se están tratando?

Estamos poniendo en común aspectos que nos hacen sufrir a todos. Se trata de encontrar lo que nos ha impactado más, lo que nos ha hecho pensar más, que tendremos que cambiar. El «como» ya es más difícil porque implica más partes. El «como» vendrían a ser las fórmulas. En Barcelona pueden funcionar unas y en Kinshasa otras. Hay realidades diversas, pero las grandes ciudades presentan unas cuestiones comunes.

Barcelona tiene los mismos retos como una gran ciudad como Madrid?

Los desafíos coinciden. El individualismo, la soledad, la pobreza o ciudades de crecimiento artificial que crean barrios deshumanizados. Pero la Iglesia está justamente para humanizar, para dar un sentido de fraternidad en las convivencias humanas, que no siempre son fáciles. El problema es cómo llegar a las personas. Como fomentamos el encuentro personal con Cristo.

Para llegar a este «como», ¿qué pasos debe seguir la Iglesia?

Qué cosas debemos cambiar y potenciar? El Papa lo dice en la Evangelii Gaudium: «Sueño en cambiarlo todo». Debemos llevar la salvación de Jesucristo a las personas. Debemos conocer cómo son las personas para ofrecerles el Evangelio con el lenguaje de hoy. Por ejemplo, el arzobispo de Monterrey contaba como en uno de los barrios más marginales y conflictivos, al acercarse a estas periferias, se daba cuenta de que la gente es buena, que tiene sentido de trascendencia. Son personas de carne y hueso como nosotros que buscan un sentido a la vida.

En esta segunda fase conclusiva han repetido teólogos como Alfonso Borrás o Carlos María Galli, que no son arzobispos. Con qué objetivo han venido?

Los pastores nos podemos desorientar en algunas cosas, y podemos necesitar luz de los técnicos, de los más expertos. Son teólogos y pastoralistas que vienen con una función subsidiaria. Pero fundamentalmente quien habla en esta segunda fase conclusiva somos los pastores. Da gusto ver el interés, la participación de arzobispos venidos de cuatro continentes.

Se espera aportar un documento conclusivo en Francisco?

Sino llegamos a conclusiones no es importante. Lo que más destaco es el diálogo y todo lo que hemos puesto en común. Más que dar conclusiones al Papa, que también lo procuraremos, la escucharemos.

¿Qué opina del acto y la eucaristía que tendrá lugar hoy en la Sagrada Familia?

El acto de hoy es un acto muy bonito. En medio de la gran ciudad. De una ciudad que valora la cultura y la religiosidad. Es un acto cultual y cultural. Pienso que con el mensaje del Papa, con la escolanía de Montserrat y la polifónica de Puig-Reig, el éxito está asegurado. Pero sobre todo, por la palabra de Dios.

¿Te ha interesado este contenido? Suscríbete a nuestro boletín electrónico. Cada semana, la actualidad de la Iglesia diocesana en tu correo.

Te interesará ...