Año Jubilar de la Misericordia
Tendrá comienco de manera oficial y solemne el Domingo de la Divina Misericordia, es decir el II Domingo de Pascua

Durante la homilía de la celebración penitencial que tuvo se celebró el pasado sábado 13 de marzo, el Papa Francisco anunció la celebración de un Año Santo extraordinario de la Misericordia tomando como inspiración la carta de San Pablo a los Efesios: “Dios rico en misericordia” (Ef 2,4).
A lo largo de este Año Jubilar, que tendrá comienco de manera oficial y solemne con la lectura y publicación junto a la Puerta Santa de la Bula, el Domingo de la Divina Misericordia, se buscará promover en todo el mundo la apertura extraordinaria de las iglesias y favorecer la celebración del sacramento de la Reconciliación.
Tradición judia de los años Jubilares
Antiguamente, para los hebreos el jubileo era un año declarado santo, que recurría cada 50 años, y durante el cual se debía restituir la igualdad a todos los hijos de Israel, ofreciendo nuevas posibilidades a las familias que habían perdido sus propiedades e incluso la libertad personal. A los ricos, en cambio, el año jubilar les recordaba que llegaría el tiempo en el que los esclavos israelitas, llegados a ser nuevamente iguales a ellos, podrían reivindicar sus derechos.
La Iglesia católica ha dado al jubileo hebreo un significado más espiritual. Consiste en un perdón general, una indulgencia abierta a todos, y en la posibilidad de renovar la relación con Dios y con el prójimo. De este modo, el Año Santo es siempre una oportunidad para profundizar la fe y vivir con un compromiso renovado el testimonio cristiano. El Papa Francisco pone al centro de la atención el Dios misericordioso que invita a todos a volver hacia Él.
El Santo Padre comenzó el anuncio de este año Jubilar diciendo: «éste es el tiempo de la misericordia. Hay tanta necesidad hoy de misericordia, y es importante que los fieles laicos la vivan y la lleven a los diversos ambientes sociales. ¡Adelante!”.