Agradecimiento al Santo Padre Benedicto XVI por su Visita Pastoral
[Obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense] Los Obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense queremos agradecer a Dios el gozo de haber tenido al Santo Padre Benedicto XVI entre nosotros, los pasados días 6 y 7 de noviembre, cuando ha venido a Barcelona invitado por el Sr. Cardenal para dedicar la basílica de la Sagrada Familia [...]
[Obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense]
Los Obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense queremos agradecer a Dios el gozo de haber tenido al Santo Padre Benedicto XVI entre nosotros, los pasados días 6 y 7 de noviembre, cuando ha venido a Barcelona invitado por el Sr. Cardenal para dedicar la basílica de la Sagrada Familia y para visitar la Obra del «Niño Dios».
Agradecemos también a la persona del Santo Padre, que con sus palabras y su presencia nos ha confirmado en la fe y nos ha alentado en nuestro camino de cristianos. Nos sabemos portavoces de los miles y miles de fieles, que durante ese fin de semana han podido escuchar las enseñanzas del Sucesor de Pedro, rezar con él y seguirlo durante las horas que ha convivido con nosotros.
Somos conscientes, como Benedicto XVI, que la dedicación de la Sagrada Familia ha sido la cima y la desembocadura de una historia de esta tierra catalana que, sobre todo desde finales del siglo XIX, ha dado una pléyade de santos y de fundadores, de mártires y de creadores de cultura y belleza cristianos, así como tantos hijos de la Iglesia dedicados a la enseñanza, a la beneficencia o al cuidado de los enfermos y discapacitados.
Al mismo tiempo, hacemos nuestra su oración, que formuló solemnemente durante aquella celebración: «Al contemplar admirado este recinto santo de asombrosa belleza, con tanta historia de fe, pido a Dios que en esta tierra catalana se multipliquen y consoliden nuevos testimonios de santidad, que presten al mundo el gran servicio que la Iglesia puede y debe prestar a la humanidad: ser icono de la belleza divina, llama ardiente de caridad, cauce para que el mundo crea en Aquél que Dios ha enviado (cf. Jn 6,29)”. Y acogemos de corazón su llamada a «multiplicar los gestos concretos de solidaridad efectiva y constante, manifestando así que la caridad es el distintivo de nuestra condición cristiana».
Alentados por esta llamada, nosotros, Obispos de la Tarraconense, nos proponemos y proponemos a todo el pueblo cristiano que peregrina en Catalunya, una nueva primavera del espíritu, un nuevo impulso evangelizador al servicio de toda la sociedad y una generosa entrega a los más pequeños y necesitados: que cada uno en su entorno sea llama ardiente de fe y de caridad.
Los Obispos de Catalunya
Tarragona, 14 de noviembre de 2010